Frente a este diagnóstico común, los panelistas del segundo conversatorio “¿Cómo generamos bienestar social para La Araucanía y Arauco?” dialogaron durante la mañana del viernes en torno a propuestas sobre la infraestructura para el desarrollo, ruralidad y alianzas productivas entre el mundo privado y las comunidades mapuches, en línea con la Propuesta de Trabajo por la Paz Social y el Progreso en La Araucanía y la Provincia de Arauco, dada a conocer en marzo pasado por la CPC, tras un trabajo conjunto de actores del mundo privado en diálogo con sociedad civil de la región.

El panel estuvo conformado por el Ministro de Obras públicas, Alfredo Moreno; la presidenta del Comité CPC de Diálogo y Acción Araucanía-Arauco, Claudia Lillo; la coordinadora del Centro de Emprendimiento de la Universidad Autónoma, Rosa Canuimil; y el empresario y presidente de Fundación EducAraucanía, Ignacio del Río.

En la macrozona sur se vive una realidad que es especial y única en el país: la presencia de diferentes culturas y etnias que comparten un mismo espacio y desean encontrar la manera de convivir mejor y que el bienestar llegue a todos. A lo largo de décadas, un conjunto de elementos políticos, sociales, culturales, jurídicos, económicos y de seguridad se han ido entrelazando para generar una realidad compleja y multidimensional, que debe ser abordada en forma separada de la violencia y del erróneamente llamado “conflicto mapuche”.

El ministro de Obras Públicas, Alfredo Moreno, reconoció que la pobreza en La Araucanía y Arauco tiene su origen en una situación no resuelta, donde la clave para avanzar en una solución “está en retomar la confianza y el trabajo conjunto”. Agregó que “La Araucanía la construyen las personas que viven en la Araucanía, que son personas que están emprendiendo a pesar de la adversidad, y el Estado habilita, da el marco y las condiciones, como las garantías de seguridad, pero el Estado no crea el desarrollo”.

Claudia Lillo, presidenta del Comité CPC de Diálogo y Acción Araucanía-Arauco y candidata a diputada por la región, destacó la necesidad de contar con un plan de desarrollo a largo plazo. “Los últimos 30 año, en La Araucanía no ha habido una institucionalidad que permita planificar el desarrollo en los territorios. Ha fallado el Estado y la clase política ha gestionado la pobreza”. Por eso hizo un llamado a trabajar de manera unida en materias como alianzas productivas con las comunidades mapuches, dando un ejemplo al resto del país de cómo hay que trabajar. “La única forma de avanzar es volver a mirarnos; tenemos que construir desde lo que nos une”, dijo.

En tanto, la coordinadora de emprendimiento e innovación de la Universidad Autónoma, Rosa Canuimil, reconoció que en la región hay muchos pequeños emprendimientos, “pero problemas como la pandemia, la falta de conectividad y la brecha digital impiden que los productores puedan comercializar sus productos”. Agregó que también es grave el problema de falta de confianza y aseguró que hoy es clave el reconocimiento de la lengua mapuche. “No hay confianza porque no nos conocen”.

En esta línea, el empresario Ignacio del Río afirmó que “los mapuches quieren resolver ellos sus problemas” y explicó que frente al grave problema de la pobreza, es clave la educación: “La educación genera oportunidades, emprendimientos y finalmente riqueza”.

Para seguir ahondando en estos temas y en la búsqueda de soluciones que traigan progreso y paz a la macrozona sur, el próximo viernes 10 de septiembre, la CPC, Corparaucanía, la Multigremial de La Araucanía y La Tercera presentarán el tercer conversatorio, con foco en la plurinacionalidad e interculturalidad. Para participar puedes inscribirte en este enlace.

Revive el segundo conversatorio aquí: