El primer efecto visible de la crisis sanitaria en las pensiones fueron las abruptas caídas que registraron los multifondos en marzo. Si bien en un inicio la baja fue más pronunciada que la ocurrida en la crisis subprime, la recuperación también ha sido más rápida, cuenta el superintendente de Pensiones, Osvaldo Macías, a poco más de 100 días desde que llegó el coronavirus al país. Pero también es cierto que ya se están empezando a notar los otros efectos del coronavirus en el sistema de pensiones: baja de cotizantes y pensionados, alza en cotizaciones previsionales declaradas y no pagadas (DNP), entre otras cifras que el regulador está mirando con detención por estos días. Lo que también está mirando Macías, son las indicaciones que ingresó el gobierno al Congreso para limitar los cambios de fondos y regular a las personas que los recomiendan.
¿Qué le parecieron las indicaciones?
-Creemos que va en la dirección correcta, y apoyamos fuertemente las indicaciones que ingresó el gobierno. En el caso de la regulación y supervisión de estos recomendadores, evidentemente que el mínimo estándar para que la conducta de mercado sea adecuada y haya un buen trato a los afiliados, es entregando información correcta, evitar la entrega de información engañosa, oportunista, errónea. También deben tener conocimientos comprobados, una conducta intachable y responder por eventuales perjuicios a los afiliados, haciéndose responsables por lo que recomienden. Tienen que estar registrados en la Superintendencia.
¿Y con eso es suficiente?
-No basta con eso, porque además vemos que hay una construcción de la fe pública que es importante tratar desde ya. Observamos que hay conflictos de intereses evidentes en los recomendadores de fondos, que manejan información que influye en los precios, y por lo tanto, durante ese periodo donde saben que van a hacer una recomendación, pueden adelantarse y comprar instrumentos financieros en beneficio propio. Eso no puede estar sin ninguna regulación o supervisión.
¿Han detectado que estos recomendadores entreguen información falsa o engañosa?
-Como no regulamos ni supervisamos a estos recomendadores, no hemos hecho mediciones para ver si lo que dicen es verdad o no, pero claro, se difunden noticias que uno escucha y sabe que son falsas, o frases que circulan en redes sociales.
¿Cree que quedó bien planteado el límite a cambios de fondos?
-La regulación a cambios de fondos ha sido lo más polémico, nosotros lo vemos desde dos puntos de vista. Lo importante es, por un lado, tener una visión de largo plazo de las inversiones y, por otro, evitar las externalidades negativas que producen todos estos cambios. Urge sacar ambas regulaciones, no es un buen momento para postergar esto, el tema ya está aquí. Estos recomendadores efectivamente marcan el ritmo de los cambios de fondos, lo que hemos visto este año son traspasos bien significativos de las personas: a fines de mayo se han cambiado de fondo 710.000 afiliados, lo que genera 4.400.000 operaciones. ¿Por qué? Porque algunos de ellos se cambian más de una vez, y también porque a veces distribuyen sus ahorros en más de un fondo. Eso implica US$68.000 millones. No sé qué más podemos esperar para avanzar en una legislación que proteja a las personas. Urge que esta legislación se apruebe, esto es en beneficio de los afiliados y de nadie más.
¿Qué externalidades negativas han detectado que producen estos cambios?
-Esto también influye a las personas que no se cambian. Hoy las AFP tienen más liquidez de la que debieran tener en los portafolios, justamente para enfrentar estos cambios de fondo. (...) También está ocurriendo algo que hace poco no veíamos: las AFP están empezando a ser vistas como clientes molestos para ciertos proveedores de fondos extranjeros, porque entran y salen mucho en los fondos extranjeros.
Las indicaciones dicen que el regulador va a poder definir en cuántos días se concretan los cambios de fondos cuando un afiliado lo pide, lo que no puede superar los 30 días de corrido. Hoy son cuatro días hábiles ¿Cuánto cree que sería un tiempo prudente?
-Lo que existe hoy es una regulación que establece que el traspaso se hace en cuatro días hábiles posteriores a la solicitud de cambio. Esa norma existe para evitar los arbitrajes, porque no hay cómo saber lo que pasará con los mercados en cuatro días hábiles. En cambio, si los traspasos se hicieran al día siguiente, como alguna gente plantea, se puede arbitrar, porque hay un desfase en los precios de los activos financieros. Y arbitrar es ganar con cero riesgo, pero a costa de los otros, es decir, gano yo porque me muevo más rápido, pero pierden los afiliados que no se cambiaron. Eso no se puede permitir y por eso están los cuatro días hábiles, para proteger a las personas. No se puede bajar, y no se va a bajar.
¿Cuál es el plazo exacto que se necesita?
-Es un tema que la Superintendencia tendrá que ir estudiando si es que se aprueba la legislación, porque esto es dinámico. El objetivo es que el supervisor tenga un margen de acción, la idea no es fijar 30 días, sino que ir viendo cómo va evolucionando, en función de cómo se mueven los afiliados, cómo se comportan las carteras, ir regulando el plazo, pero de ninguna manera la idea es dejar a las personas con un desfase de 30 días en sus movimientos de fondos.
¿Y que los movimientos puedan ser sólo a fondos adyacentes le parece bien?
-Lo que pasa es que no moverse a fondos adyacentes significa hacer market timing, es ganarle al mercado. La mayor parte de la literatura financiera a nivel mundial establece que no se le puede ganar al mercado, y está demostrado en nuestro estudio que no ha funcionado (...) Pensamos que es muy sano plantear una regulación para que los cambios sean entre fondos adyacentes.
El proyecto pone a estos recomendadores bajo la regulación de la Superintendencia de Pensiones, ¿debería ser conjunta con la CMF?
-Fueron las indicaciones que presentó el gobierno, pero son temas que sin duda son abordables.
Recibieron muchas llamadas de afiliados preocupados por sus fondos cuando inició la crisis debido a la caída de los multifondos. ¿Sigue así?
-Estamos a 100 días desde que se detectó el primer caso de Covid en Chile. Efectivamente las personas estaban muy inquietas con lo que estaba pasando con la rentabilidad de los fondos, que tuvieron caídas muy abruptas. Fue una crisis mucho más profunda comparativamente con la crisis subprime de 2008, pero también hemos observado, en los últimos dos meses, recuperaciones muy vigorosas.
¿Cómo se refleja eso en cifras?
-Solo como ejemplo: a 105 días aproximadamente desde que inició la crisis subprime, el fondo tipo A había perdido 27%, y en la actual crisis, a 105 días, ha perdido 15%. Al hacer la misma comparación con el fondo B, en la crisis subprime perdía 24%, y con el Covid es 10%, menos de la mitad. El fondo C en la crisis subprime llevaba perdido un 15% a 105 días, y ahora es sólo un 4,6%. El fondo D durante la crisis subprime había perdido 8%, y con el Covid solo 0,3%. Es decir, en el fondo D prácticamente todo lo que hemos perdido lo hemos recuperado. El fondo E es el más conservador y el más emblemático en este caso, porque en la subprime a los 105 días llevaba perdido 2%, y ahora en la actual crisis el fondo E se recuperó completamente en tiempo equivalente, y desde que empezó la crisis y ha rentado 3,68%.
¿Qué otros efectos están viendo en el sistema de pensiones por la crisis sanitaria?
-Los cotizantes en el sistema de pensiones hace un año venían creciendo a tasas de 3% aproximadamente, comparando años móviles. Ese crecimiento empezó a decrecer paulatinamente a partir de la crisis social, cuando empezó a haber un aplanamiento del crecimiento, pero en los últimos dos meses los cotizantes han disminuido, primero en -0,1%, y según la última información que tenemos, estamos viendo una disminución de poco más de un 1%.
¿Y en pensionados?
-Aproximadamente se pensionan 170.000 personas por año, y el número de pensionados crece cerca de un 10% al año. En el primer trimestre de este año hubo una recuperación, porque mucha gente probablemente postergó trámites de pensión durante la crisis social, pero las efectuó durante enero y febrero, y eso elevó en el primer trimestre el número de pensionados. Sin embargo, ya en abril vemos una caída fuerte en el número de pensionados, y también la observamos en mayo. Otro aspecto que es relevante son las DNP, estamos observando en pesos que en abril se produce un aumento importante respecto a lo que se veía en meses equivalentes.