El mercado aéreo en Chile está cada vez más cerca de alcanzar el nivel de actividad que tenía antes de que la pandemia del Covid-19 generara un aterrizaje forzoso para los viajeros y aerolíneas en el país y alrededor del mundo.
Así, tras dos meses desde que el gobierno levantó el uso obligatorio de mascarillas en todo el territorio nacional y eliminó el Pase de Movilidad, los pasajeros transportados a través del aeropuerto Arturo Merino Benítez (AMB) anotaron en noviembre su mejor mes en lo que va del año, y quedaron ad portas de alcanzar los niveles previos a la diseminación del virus SARS-CoV-2 a nivel global.
Lo anterior, según lo revelan las cifras del penúltimo mes de 2022 que reportaron en un informe los accionistas mayoritarios de Nuevo Pudahuel, Aéroports de Paris (ADP), que junto a la francesa Vinci Airports controlan la concesionaria del terminal aéreo, con un 45% y 40% de la propiedad, respectivamente.
De acuerdo al informe, durante noviembre se movilizó un total de 1.751.472 pasajeros, cifra que marca un alza del 31,5% en comparación al mismo mes de 2021, y supera en 47.989 personas el registro de octubre. Asimismo, este resultado ya se ubica solo un 8,1% por debajo del nivel registrado durante el mismo mes de 2019 -considerado nivel prepandemia-, mes en que 1.879.010 pasajeros se transportaron a través del principal terminal aéreo nacional.
Sin embargo, para el período que comprende todo lo que va de 2022, el desempeño de la denominada puerta de entrada a Chile todavía está bastante por debajo del período sin Covid-19. Así, en enero-noviembre 16.873.086 pasajeros pasaron por AMB, un 25% menos que los 22.532.564 de personas transportadas en el mismo lapso de 2019.
De todos modos, el resultado de estos primeros 11 meses supone casi el doble de lo visto el año anterior, superando en un 98,1% el registro entre enero y noviembre de 2021.
En tanto, los movimientos de aviones alcanzaron los 10.856 en noviembre, el segundo mejor registro del año 2022. Dicho nivel, marca un alza del 22,4% en comparación con el mismo mes de 2021, pero una caída aún del 17,3% respecto al onceavo mes de 2019.
Según el subgerente de Comunicaciones y Asuntos Corporativos de Nuevo Pudahuel, Manuel Valencia, el mejor desempeño del tráfico aéreo del terminal se explica, en gran medida, por el fin de las restricciones sanitarias.
“Como operadores del Aeropuerto de Santiago estamos observando una gradual reactivación del tráfico de pasajeros, que está tomando vuelo, luego de la flexibilización de medidas asociadas a la pandemia como el uso de la mascarilla o la exigencia certificados de vacunación que dejaron de ser obligatorios”, comentó a Pulso.
Pese a que califica las cifra de noviembre como “alentadoras”, repara en que el cierre del año será “con flujos un 25% más bajos que el ejercicio de 2019, previo a la pandemia”.
“Aún así, los viajes se están reactivando y ante la mayor demanda de la temporada alta, iniciamos la operación aeronáutica del Terminal 2-D, que suma 10 nuevas puertas de embarque y 22 mil metros cuadrados de superficie para atender de mejor forma a nuestros pasajeros, además de reforzar nuestro personal y de disponer de tecnologías de check in y otras para agilizar los trámites aeroportuarios”, agregó.