Fue en su primera Cuenta Pública, cuando el Presidente Gabriel Boric anunció que la largamente esperada ruta ferroviaria que unirá a Santiago con Valparaíso formaría parte del Plan Nacional de Desarrollo Ferroviario de su gobierno.
“Le he pedido a nuestro Ministro de Transportes que comencemos a trabajar para hacer realidad un sueño anhelado hace mucho tiempo y del cual ya se han escrito muchos proyectos, no más diagnóstico y empecemos a trabajar en serio para el tren que va a unir a Valparaíso y Santiago”, dijo el Mandatario en su discurso el 1 de junio de 2022, ante el Congreso nacional.
Y pese a que el propio titular de Transportes se encargó después de aclarar que el proyecto requería ser evaluado desde la rentabilidad social, lo cierto es que durante este tiempo, tanto la cartera encabezada por Juan Carlos Muñoz, como el Ministerio de Obras Públicas y la Empresa de Ferrocarriles del Estado (EFE), se abocaron a estudiar las alternativas de trazado. Decisión que finalmente fue adoptada.
Este martes, el Presidente Boric comunicó, junto al ministro de Obras Públicas, Juan Carlos García, que el trayecto escogido para la obra ferroviaria será vía Tiltil.
En concreto, el proyecto contempla un trazado que pasa por La Calera, para luego conectar con Limache y Viña del Mar, usando parte de la infraestructura que ya existe - como la tercera vía de carga - además de infraestructura de los servicios suburbanos (La Calera - Limache y Quinta Normal -Batuco).
Las estaciones en total serán seis: Quinta Normal, Batuco, Tiltil, Llayllay, La Calera, Limache y El Salto.
Este viaje conectará a la comuna de Quinta Normal con el sector del El Salto, en Viña del Mar, en una hora y 30 minutos.
Según detallaron las autoridades, se espera que el tren esté operativo el año 2030. Para ello, el cronograma considera la licitación del estudio integral durante este año y la licitación internacional de las obras para 2025, bajo la modalidad de asociación público privada. Todo, a través del sistema de concesiones de Obras Públicas.
El proyecto considera una inversión de US$1.320 millones en su primera etapa. La segunda, que conectaría directamente a Limache con la ciudad de Valparaíso, elevaría la cifra total hasta los US$3.820 millones.
En la ocasión, se destacó que al utilizar infraestructura ya existente, ya que parte importante del trazado avanzará por terrenos que hoy son propiedad de EFE, los costos de expropiación se reducen sustancialmente. Según se especificó, entre Limache y El Salto se realizará la construcción de una línea paralela al Metro de Valparaíso.
Según detallaron desde el MOP, los análisis de rentabilidad social aún no están listos porque serán incluidos dentro del estudio integral que comenzará en los próximos meses. De todos modos, recalcaron que “considerando los ejes de la propuesta, en cuanto a gradualidad de la inversión, mejoramiento de infraestructura pre existente y conectividad de zonas postergadas, hacen proyectar que los beneficios sociales por ahorros de tiempos de viajes y espera, disminución de emisiones y efectos ambientales, reducción de accidentes, entre otros, justifiquen plenamente el desarrollo de este proyecto desde una perspectiva de bienestar social”.
Foco en la integración
El Presidente Boric destacó en la ocasión que “estamos cumpliendo nuestros compromisos” y remarcó que la presentación del trazado permitirá el “renacer de la conectividad ferroviaria de pasajeros entre el Gran Valparaíso y el Gran Santiago”.
“Decidimos apostar por un tren de cercanía, con el foco puesto en la integración de las localidades que se fueron desarrollando al alero del antiguo tren, pero que una vez que se abandonó el servicio ferroviario, allá por 1986, fueron quedando también al margen de ese desarrollo inclusivo que es el que, nosotros por lo menos como Gobierno, aspiramos como país”, fundamentó el mandatario.
El Presidente también recordó que en septiembre de 2023 se cumplen 160 años de la línea que unía a Valparaíso con Santiago, y aseguró que “me parece muy apropiado que más de un siglo y medio después, retomemos esta tradición ferroviaria y pongamos sobre la mesa los recursos necesarios para poder llevar adelante esta inversión”.
En tanto, el ministro de Obras Públicas, Juan Carlos García, destacó que “el trazado que presentamos hoy son 172 kilómetros que conectará el Gran Valparaíso con el Gran Santiago en una hora y media. Es una inversión de US$1.300 millones, cuyos estudios los iniciaremos a la brevedad, de manera que la licitación internacional la hagamos en este Gobierno, en el año 2025″.
García remarcó que el monto invertido significa “una de las inversiones más importantes que ha hecho el Estado de Chile en infraestructura”, y destacó que la obra pública aportará al desarrollo económico de las localidades “no solamente por los cientos de empleo en construcción que va a generar esa etapa” ya que “integrando nos desarrollamos todos, y el mandato del Presidente Boric es que nos desarrollemos integralmente, y este es un ejemplo indudable de que así lo estamos haciendo”.
Por su parte, Juan Carlos Muñoz destacó que el anuncio permitirá contar con un servicio “de primer nivel”, y que permitirá competir con la oferta ya disponible.
“Nuestro objetivo es lograr que las personas se sientan atraídas por el servicio ferroviario y poder ofrecer un nivel de servicio, tanto en tiempo de viaje, en confiabilidad, en comodidad y en seguridad, a la altura de las expectativas de las personas”, enfatizó Muñoz.
Positiva acogida
Desde el Consejo de Políticas Públicas (CPI), su director ejecutivo, el exministro de Obras Públicas, Carlos Cruz, valoró el anuncio como “una muy buena noticia”. Si bien destacó que el proyecto no se trató de un tren rápido “como muchos habrían esperado”, aseguró que el proyecto “refuerza una conexión ferroviaria estable que contribuirá a una mayor conectividad entre los territorios y esto ayudaría generar espacios integrados para abordar el déficit de vivienda a largo plazo”.
Sobre el plazo 2030, Carlos Cruz dijo que “debemos hacer todo lo posible para que el proyecto se implemente en esa fecha; contribuye a ello el hecho de que una parte del trazado ya esté definido. Esperamos que se mejoren los lugares que tienen dificultades pero es un proyecto detrás del cual todos debemos ponernos para que se pueda ejecutar lo antes posible”.
En tanto, desde Copsa, asociación gremial que reúne al 90% de las concesionarias de Chile, su presidente, Leonardo Daneri, destacó el impacto en la descongestión de las carreteras que tendría el proyecto.
“Es una gran decisión el anuncio del Tren Santiago-Valparaíso, ya que Chile enfrenta una estrechez de infraestructura, con muchas vías saturadas. Este proyecto ferroviario ayudará a descongestionar la Ruta 68, cuya renovación estará lista al menos en 10 años. Por ello, este esfuerzo público-privado es clave para poner al país nuevamente al día en esta materia”, dijo Daneri.