Las ventas minoristas que fueron un gran impulso a la economía en 2021, han comenzado a desacelerarse a comienzos de este año. Según un índice que elabora la Cámara Nacional de Comercio (CNC) estas mostraron una fuerte desaceleración en enero y nulo crecimiento en febrero en la Región Metropolitana, en otra señal de enfriamiento de nuestra economía, tras un histórico crecimiento el año pasado. En enero, las ventas minoristas presenciales crecieron 1,5% anual en enero, y no tuvieron crecimiento en febrero. Así, el indicador tuvo un alza de apenas 0,7% en los dos primeros meses de este año, según detalló la CNC.
“Tras marcar durante el segundo semestre del 2021 niveles que estaban en torno al 20%-25% superior a lo que históricamente se vendía previo a la pandemia, los resultados de enero y febrero dan cuenta de un retorno a niveles más en línea con los que normalmente se vende en esos meses e incluso levemente por debajo”, dijo la gerenta de Estudios de la CNC, Bernardita Silva, en un comunicado.
La categoría de bienes durables marcó una fuerte caída en enero y febrero, en parte por mayores bases de comparación. Muebles, línea hogar y artefactos eléctricos mostraron bajas importantes en los primeros meses. Mientras que los segmentos de calzado y vestuario crecieron en los dos primeros meses.
“Calzado destaca con alza reales anuales de 26,9% y 22,1% en enero y febrero, respectivamente, que se explican en gran parte por las fuertes bajas marcadas en iguales meses del año pasado. La categoría acumula al segundo mes del año un alza de 24,3% real”, indicó la CNC en su informe mensual.
En 2021, el PIB del comercio tuvo un alza de 22,6%, influido principalmente por una mayor liquidez de los hogares, debido a las ayudas estatales como el IFE Universal y los retiros de fondos previsionales. Respecto al gasto del PIB, el consumo contribuyó con 13,4 puntos del crecimiento total, donde el consumo de los hogares evidenció un alza de 20,3%, destacando los bienes durables con un alza de 44,9%.
De todos modos, desde la CNC, indicaron que “son factores transitorios los que están detrás de este gran resultado y es de esperar que vayamos de más a menos durante el 2022, terminando con una contracción de las ventas del retail, influida por la desaparición de estas variables transitorias, junto a un mercado laboral que aún le falta por recuperarse, sobre todo por el lado de los empleos formales y de calidad”.