El plan que alista Piñera para reactivar reforma a notarios. Propone test de conocimiento

En los últimos 23 años se han presentado más de 30 proyectos que han buscado modificar el sistema de notarios y conservadores, pero ninguno de ellos ha tenido éxito. Un nuevo proyecto a esta larga lista se sumará una vez que asuma la presidencia Sebastián Piñera. La iniciativa está dentro de los proyectos que contempla la llamada agenda de reimpulso competitivo que es liderada por el ex ministro de Economía, Juan Andrés Fontaine, y el ex vicepresidente de Corfo Hernán Cheyre, por lo tanto, ambos economistas están trabajando esta propuesta.

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Si bien no hay una fecha clara para su ingreso, fuentes cercanas al equipo económico sostienen que es un tema importante para Piñera y, por ende, el plan original considera su ingreso durante el primer año de mandato.

Un punto que juega a favor de Piñera es que en su primer período ya impulsó una iniciativa similar, por lo que el nuevo texto legislativo tendrá como base el proyecto que se presentó en noviembre de 2012.

De acuerdo a lo que se ha esbozado, el texto apuntaría a modificar el régimen de nombramiento y las funciones de ambos sistemas, junto a ello se realizará un filtro de conocimiento para quienes deseen postular a los cargos de notarios y conservadores. Además, se limitará el ejercicio del cargo hasta los 75 años eliminado el cargo vitalicio.

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También se tiene sobre la mesa el avanzar en la masificación del uso de la firma electrónica para prescindir la certificación notarial en ciertos casos, como por ejemplo, pagarés, compraventa de vehículos motorizados, arriendo de inmuebles entre otros.

Otro de los puntos que se pretende cambiar es el rol del archivo judicial con el objetivo de ir avanzando hacia sistemas digitales y registros electrónicos de escrituras públicas e inscripciones conservatorias.

De acuerdo a Alejandro Arriagada, ex asesor legal y uno de los autores del primer proyecto de Piñera señaló que con esta medida "el valor de obtención de copias, especialmente del archivo judicial, disminuiría considerablemente, puesto que hoy los precios de obtenciones de estos documentos son privativos y nacen de su condición de monopolio, lo que sin duda afecta la garantía de igualdad de acceso a la justicia".

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Para Arriagada, "se debe avanzar en registros unificado de escrituras públicas, que permitan la consulta directa de los usuarios con métodos de indexación, búsqueda y de archivo con estándares internacionales. Existe ya mucha experiencia en estas materias a nivel nacional e internacional".

Otra de las fórmulas que se aplicó en el proyecto anterior para modernizar a la inscripción de propiedades ante los conservadores y que tomaría fuerza ahora es la creación de un registro electrónico que detalle su individualización, ubicación, su actual y anteriores propietarios, las hipotecas, gravámenes, prohibiciones y toda inscripción, subscripción, cancelación y anotación de que sea objeto.

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Parlamentarios de diversas tendencias políticas concuerdan en que la reforma al sistema notarial y registral debe ser una de las prioridades del próximo Gobierno. En ese sentido coinciden que en ese trabajo de perfeccionamiento lo primero que se debe tener claro es el tipo de sistema que se querrá para el país.

El presidente de la Comisión de Constitución de la Cámara de Diputados, Fuad Chahin (DC), considera que "es clave que tengamos sistemas en línea, con plazos determinados, con tarifas transparentes, que se puedan automatizar absolutamente todo. Ir hacia un registro digitalizado".

Otro integrante de esa comisión, Arturo Squella (UDI) planteó que se deben hacer "todos los cambios que no afecten la certeza que actualmente nos entrega el servicio registral en Chile".

Mientras, el integrante de la Comisión de Constitución del Senado, Pedro Araya (independiente) acotó que "el sistema tiene que avanzar en dos temas fundamentales. Primero en una definición clara de cuantas son las notarías que se necesitan en el país. Segundo, es la fiscalización".