El próximo lunes 14 de diciembre, el territorio nacional tendrá la segunda oportunidad, en menos de dos años, de presenciar un eclipse total de Sol, uno de los fenómenos astronómicos que más llama la atención tanto de expertos como de aficionados.

El eclipse, que podrá ser visto en el Océano Pacífico, Sudamérica, Antártida y el Océano Atlántico, será el único de 2020, pero el primero en una década que más adelante incluye a la Antártida (4 de diciembre de 2021), Australia (20 de abril de 2023), América del Norte (8 de abril de 2024), Patagonia Argentina (2 de octubre de 2024) y España, Groenlandia (12 de agosto de 2026). En Chile, volveremos a presenciar este evento junto con Argentina en 2048 y 2064.

Según el radiobservatorio ALMA, el eclipse en su totalidad se podrá ver desde una pequeña zona en la parte sur de la Región del Biobío e Isla Mocha, desde gran parte de la Región de la Araucanía, y desde una sección de la parte norte de la Región de Los Ríos.

Justo después de las 11:30 am en Chile continental, la Luna comenzará a cubrir gradualmente al Sol.

La totalidad del eclipse comenzará a las 12:59 pm en Isla Mocha, a las 1:02 pm en Temuco y a las 1:03 pm en Pucón. En las zonas donde durará más tiempo, la totalidad del eclipse será de 2 minutos y 10 segundos.

De acuerdo a eclipseschile.gob.cl, en Los Ríos habrá 100% de visibilidad; Biobío 94%; Los Lagos 93%; Ñuble 92%; Maule 87%; O’Higgins 81%; Aysén 79%; Valparaíso y Metropolitana 78% y Coquimbo 66%. En el resto del país, se podrá apreciar entre un 55% y un 26%.

Pero este evento astronómico, ¿será visible para todos? Al parecer, a menos de cuatro días de su inicio, al menos en la zona de más oscuridad las previsiones climáticas no son las mejores.

Eclipse de 2019, fotografiado por Tomás Westenenk

Mirando al cielo

De todas maneras no serán pocos quienes quieran documentar el fenómeno con su smartphone o cámara profesional. Existen varios datos útiles enfocados en seguridad tanto para el dispositivo como nuestros ojos, y técnicas para lograr la mejor captura, independiente de la calidad de la cámara.

“Hoy un smartphone es suficiente para tener un registro increíble del eclipse total. Con un equipo con cámara profesional más unos útiles consejos, cualquiera podrá lograr una excelente foto y de alta calidad”, dice Tomás Westenenk, fotógrafo que en 2019 capturó desde un avión y con un teléfono Samsung Galaxy, una imagen del eclipse que dio la vuelta al mundo.

Para el fotógrafo y “Cazador de Eclipses” Iván Castro, quien estuvo realizando pruebas con un Samsung Galaxy S20 FE, “la mejor recomendación para una captura óptima es ocupar el Modo Pro que integran los smartphones, porque te da control sobre la exposición de luz”.

“Recordemos que un eclipse es extremadamente luminoso y necesitamos tomar fotos con baja luz; el Modo Pro es la mejor opción porque permite oscurecer o bajar la exposición, y promete resultados perfectos. Por lo mismo, no es recomendable en este caso usar el Modo Noche, que tiende a sobre iluminar”, dice.

Para proteger el lente de la cámara del smartphone, Castro recomienda poner un filtro solar externo, del que existen en el mercado unos films adhesivos, o bien se puede usar el mismo filtro de los lentes de eclipse certificados. Así como para los ojos, se aconseja emplear lentes certificados por ISO.

Luego, sólo basta con activar el Modo Pro de la cámara del smartphone en el modo manual, ajustar el ISO idealmente entre 50 y 200, y jugar con las distintas velocidades de obturación para lograr una correcta exposición.

Ya en la fase total, la idea es no usar filtro solar porque la foto se verá completamente oscura. Los parámetros antes mencionados funcionan de la misma forma.

El “cazador de eclipses” recuerda que el tiempo de duración de eclipse total será de dos minutos, por lo que lo mejor es practicar a la hora del eclipse (con filtro) y pensar en sitios para componer la fotografía. De la misma forma, aconseja enfocar al infinito con el objetivo, usar si es posible un gran angular (también disponible en varios smartphones de gama alta) y un cargador externo para la batería.

Iván Castro probando fotos para el eclipse con un Samsung Galaxy S20 FE.

Otras opciones

Cristián Barraza, gerente de Productos de Motorola Chile, dice que “el mejor equipo que podemos recomendar para capturar el eclipse solar es el Moto G9 Plus, que tiene un sistema de cuatro cámaras de alta resolución, con una principal de 64 MP que incluye tecnología Quad Pixel y Night Vision. Esto permite que en lugares con poca luminosidad -incluso de noche- se cuadriplique la sensibilidad a la luz, permitiendo capturar las mejores imágenes en estas condiciones.

Marisabel Guerra, especialista de Dispositivos Móviles de LG Electronics, dice que “LG VELVET es una buena opción, porque entre sus cualidades destacan sus tres cámaras traseras (48MP, 8MP y 5MP) que permitirán lograr capturas de muy buena calidad. A ello se suma su función Steady Cam, que logra imágenes estables reduciendo drásticamente el movimiento que genera el movimiento involuntario de las manos. Más al tener que sostenerlo en una posición elevada hacia el sol”.

“Durante el eclipse necesitamos resolver dos grandes problemas: uno es la luminosidad de las fotos, que en palabras simples son los granitos que se ven cuando la imagen está oscura y la otra dificultad es la estabilidad. Ambas problemáticas se estudiaron para ser resultas con LG VELVET, el cual posee tecnología Pixel Binning que reduce el ruido o granitos que vemos en las fotos. Esto se debe al sensor de la cámara principal que es de 48MP, mientras que Steady Cam reduce en cerca del 90% el movimiento que genera la mano al capturar un video”.

Por el lado de Huawei, Max Quijada, Gerente de Productos Huawei Consumer Business Group, señala que “la Cámara Cuadruple Ultra Vision Leica de Huawei P40 Pro permite un zoom máximo de hasta 50x, lo que sumado a la inteligencia artificial incluida en su procesador, permite el modo Luna, una configuración automática de la cámara que es perfecta para retratar el eclipse. Los resultados de las fotografías darán la sensación de estar a una muy corta distancia del fenómeno natural”.

El caso de los iPhone es distinto. Si bien su cámara es muy competente, hasta ahora Apple no ha incluido ninguna opción profesional en su software, por lo que lo mejor es descargar alguna aplicación que nos ayude en este propósito. Para ello, Nightcap Camera es una buena opción, ya que amplía las posibilidades de la cámara del iPhone; y VSCO, que nos permite guardar las fotos en formato RAW, capturando toda la información de colores posible, permitiendo posteriormente editarla sin problemas con algún editor para dispositivos móviles como Photoshop.

En cuanto a las cámaras profesionales, desde Canon Chile señalan que cualquier tipo de cámara es útil al tomar fotos a un eclipse solar. Las cámaras profesionales pueden configurarse para que automáticamente se ajusten a la exposición de la luz, pero hay que tomar el resguardo de utilizar un filtro.

“Al momento de tomar una fotografía del eclipse, es fundamental el uso de un filtro ND (Neutral Density) para captar el momento y proteger tanto los ojos como la cámara”, explica José Méndez, Professional Market Rep de Canon.

Asimismo, el especialista agrega que al momento de la etapa total del eclipse con la ayuda del filtro “podrán tomar una fotografía con un mayor tiempo de exposición y tener la foto del eclipse que quieren conseguir”.

Otro consejo es considerar la configuración perfecta de la cámara. Este será un evento en el que habrá poca luz, por lo que es ideal el uso un trípode y un control remoto para captar el momento.

“Con la ayuda de estos elementos técnicos podemos evitar que la foto salga borrosa o con movimiento, hecho que por la poca cantidad de luz es clave”, explica Méndez.

Además, una velocidad de obturación de 1/500sec, una profundidad entre f/9 y f/11, junto con el más bajo nivel de ISO posible son la configuración técnica ideal para esta ocasión.

Porcentaje de visibilidad del eclipse en Chile (Imagen: ALMA)

Nubes y lluvia

De acuerdo a las distintas previsiones climatológicas para la zona de la Araucanía, es muy posible que en el momento del eclipse hayan nubes o incluso lluvia.

“Incluso con cierta nubosidad o lluvia, la luz de los eclipses es tan alta que podemos obtener registros interesantes y bellos de igual forma. Y aunque aún no sabemos qué pasará en Chile respecto a las condiciones del tiempo, en el caso de tener lluvia sólo habrá que preocuparse de que no le caigan gotas de agua al lente de la cámara para empañar la imagen”, dice Iván Castro.

“La otra opción es subirse a un sitio encima de las nubes si es posible”, agrega.

Raúl Cordero, climatólogo de la Universidad de Santiago, dice que esté nublado no es tan dramático. “Igual se puede ver en general a través de las nubes”. Agrega que se ve, “pero, en la zona de oscuridad total si está nublado no se va a poder ver la corona del sol que es parte del espectáculo”.

“No es recomendable mirar nunca con ojos descubiertos al Sol directamente con nubes o sin nubes”, explica.

Aplicaciones

Iván Castro también recomendó algunas aplicaciones para fotografiar el eclipse, complementando la preparación para su captura.

El primero es Photopills, un completo planificador de capturas de eventos solares, lunares y estelares, con información precisa sobre salidas de luz, crepúsculos, calendario lunar, entre otras, además de incluir calculadoras de larga exposición, timelapse, profundidad de campo, etc. para sacar el máximo partido al fenómeno.

Otra aplicación útil es Sky Guide, que ayuda al usuario a encontrar automáticamente constelaciones, planetas, satélites y otros cuerpos estelares apuntando al cielo, a través del GPS y sensores de movimiento.

Windy también puede servir para estos eventos, ya que se trata de una precisa herramienta para visualizar el pronóstico del tiempo, una variable crítica si queremos fotografiar el eclipse.

Finalmente, Eclipse Solar Crono permite cronometrar con máxima precisión el fenómeno, calculando automáticamente los tiempos de contacto exactos, notificando oportunamente cuando el eclipse se encuentra en su posición de observación final.