El Parkinson es una enfermedad progresiva y crónica. Este mal, todavía sin cura, se caracteriza por la falta de una sustancia química en el cerebro llamada dopamina, responsable de transmitir señales entre las células nerviosas y regular el estado de ánimo de las personas.
Se inicia generalmente entre los 50 y 60 años, causando una pérdida paulatina de la capacidad física y mental, hasta llegar a la discapacidad total.
Las señales nerviosas interrumpidas por la enfermedad hacen que sea cada vez más difícil coordinar los músculos incluso para movimientos simples y causan rigidez, lentitud y temblores, síntomas característicos de la Enfermeda de Parkinson (EP).
La enfermedad de Parkinson se suele denominar idiopática, lo cual significa que se desconoce su causa primaria, y aunque este déficit es el defecto primario, aún queda por descubrir cómo se pierde esta dopamina. Los estudios indican que la causa es una combinación de susceptibilidad genética y factores ambientales.
Se trata de uno de los trastornos neurodegenerativos más comunes. Sin embargo, no existe una descripción epidemiológica en Chile y tampoco hay muchas descripciones en Latinoamérica.
Solo se calcula que cerca de 40 mil personas viven con esta patología en el país y que por lo menos un 30% no lo sabe.
Por eso, un grupo de científicos y médicos decidieron realizan una investigación para medir la incidencia y prevalencia de la EP en Chile.
La investigación fue realizada por Felipe Viala, Iris Delgado, Juan Francisco Idiaqueza, Francisca Canalsa, y Pedro Chana-Cuevas y publicada en la revista Neuroepidemiology.
El grupo de estudio fue la población del sistema público de salud en Chile entre 2010 y 2018 que se registró en el sistema GES como paciente con Parkinson.
La investigación encontró en el registro 33.345 pacientes como casos confirmados con EP. La investigación arrojó que la incidencia bruta en el país en 2018 fue de fue 23,7/100.000 mientras que la prevalencia bruta fue de 160,7/100.000.
La razón hombre-mujer fue de 1,03. La prevalencia e incidencia observada en la población chilena son consistente con estudios de otros países, dice la investigación.
“La importancia de este estudio es tener cifras realistas respecto a la enfermedad con cierta base en los datos lo que no sucedía hasta la fecha”, dice Pedro Chana-Cuevas, académico de la Facultad de Ciencias Medicas de la U. de Santiago y uno de los autores del estudio.
Enfermedad de Parkinson
La enfermedad de Parkinson (EP) es una de las más frecuentes enfermedades neurodegenerativas. Bradicinesia, rigidez y el temblor de reposo se considera un signo cardinal de la enfermedad, pero también hay manifestaciones no motoras, incluyendo síntomas cognitivos, psiquiátricos y autonómicos.
Según explica Chana-Cuevas, la prevalencia aproximada que arrojó el estudio es de 1, 6 por cada mil habitantes.
“Inicialmente fueron más que los que se ingresaron posteriormente y eso no tiene que ver con la cantidad de caso sino que con una variable de tipo social cómo es la introducción de una ley. Por lo tanto la cifra real sería la que se está dando ahora”, añade.
En Chile, se espera que para el 2050, el 23,5% de la población tendrá más de 60 años, por lo que reconocer de manera temprana esta enfermedad puede ser un factor primordial para lograr un diagnóstico oportuno, que junto a una correcta rehabilitación pueden definir un exitoso tratamiento.
Otro tema que no es menor es el impacto del Covid-19 en la cifra lo que no ha sido dimensionado porque muchos pacientes son mayores porque afecta más al grupo de adultos mayores y fueron los más afectados por el coronavirus en cuanto a mortalidad.