Pese a la omniporesencia del Covid-19, otras peligrosas enfermedades siguen vigentes, y varios brotes siguen afectando a grupos importantes de personas alrededor del mundo. Es el caso del ébola, que sigue causando estragos en África, más precisamente en Guinea y la República Democrática del Congo.

El epidemiólogo y ecólogo chileno de la Universidad Andrés Bello, Julio Benavides, trabaja en un novedoso proyecto, llamado “Gondwana Ebola Task Force”, que pretende frenar los brotes de ébola en ese continente, con foco en Liberia y Guinea, y con la participación de científicos chilenos y africanos.

¿En qué consiste? A través de la música, el médico busca prevenir y actuar frente a la enfermedad. Benavides compuso una canción llamada “Ébola volvió” (”Ebola est de retour”), la que fue traducida a más de cinco idiomas dentro del continente, y transmitida en varias radios locales, además cantada por músicos de la zona.

El objetivo es generar conciencia y evitar perder más vidas por esta enfermedad mortal que vuelve a amenazar la zona con un nuevo brote, en más de ocho países.

La iniciativa liderada por Benavides, se realiza junto al biólogo camerunés Philip Tem, quien se encuentra a 40 km del brote trabajando en Zorzor, Liberia, uno de los países bajo alerta que fue gravemente afectado por la última epidemia de 2014-2016. También contó con la participación de Andrés Opazo, microbiólogo de la Universidad de Concepción.

El ecólogo advierte que la enfermedad puede alcanzar una mortalidad de 80% a 90% y se contagia a través del contacto directo con fluidos.

“Sabemos que la amplificación del ébola se juega en las tres o cuatro primeras semanas, igual que cualquier epidemia de cualquier enfermedad”, explica, quien tras componer la canción, se puso en contacto con músicos latinoamericanos, como el chileno Skyfonik y Choro de Favela en Brasil, para musicalizarla en distintos estilos y producirla.

Benavides, doctor en ecología y biología evolutiva, ha trabajado anteriormente en proyectos de preservación en África. Estuvo en 2016 realizando labores vinculadas a censos de gorilas en Camerún.

En la imagen, los músicos guineanos La Kaka y Competent, presentes en la radio Djoma Fm promocionando la canción.

Además contó con la ayuda del célebre músico de Mozambique Feliciano dos Santos, Goldman Environmental Prize 2008, con vasta experiencia en este tipo de música.

La composición ha sonado en radios de Liberia como Radio Life, y de Guinea como Espace Forêt FM y Djoma Radio. En Guinea, el grupo ‘Combattant compétent au mic’ realizó su propia versión de la canción para difusión en Nzérékoré.

Al mismo tiempo, los músicos recorren los pueblos interpretando la canción en vivo y difundiendo el mensaje preventivo.

El Covid-19 ha demorado el proyecto

Benavides, quien también trabaja en “The Monkey Lab” de la Unab, señala que lo que estamos viviendo con el Covid-19, “ellos lo experimentan casi cada dos años con alguna epidemia, con mortalidades infantiles que todavía sobrepasan el 5% en Liberia, que además estuvo en guerra civil hasta el año 1997. O el caso de Guinea, donde las principales causas de muerte son las enfermedades respiratorias, la malaria y la tuberculosis”.

Debido a la pandemia, el acadpemico de la Unab no ha podido viajar, se encuentra actualmente en Chile y coordina desde acá con su compañero camerunés, el que está en Liberia.

Benavides cuenta que han debido financiar el proyecto con recursos propios, porque aunque organizaciones como la Organización Mundial de la Salud (OMS), UNICEF y otras han manifestado interés en apoyar, la pandemia lo ha ralentizado.

El biólogo camerunés Philip Tem, quien se encuentra a 40 km del brote trabajando en Zorzor, Liberia.

Hace algunos días, OMS África difundió un video sobre la iniciativa, con lo cual, dice Benavides, “esperamos tener suficiente retorno para conseguir financiamiento para llevar a los músicos a otros pueblos y recorrer las comunidades”.

Al mismo tiempo, buscan extender estos proyectos a otros países como Sierra Leona, y crear nuevos mensajes musicales que promuevan, por ejemplo, el respeto a los sobrevivientes de la enfermedad. Benavides relata que éstos ya son estigmatizados socialmente, y estima que la situación puede empeorar tras ser reportado que, por primera vez, este brote habría iniciado con una persona sobreviviente de la epidemia anterior, con el virus oculto durante años.

“Si uno no les da esperanza a esos pueblos en África, parece que les cayó el apocalipsis. Tienen Covid-19, ébola, pobreza, malaria, entre otros. Es mucho para ellos. Eso es lo que me mueve: yo quiero mucho a los africanos, me duele que tengan ébola, porque es doloroso saber por lo que van a pasar, y es un trauma del que no se van a olvidar nunca”, lamenta el especialista.