Ministro de Salud asegura que no hay relación entre letalidad y pobreza
Este lunes, el ministro de Salud, Enrique Paris, se presentó ante la comisión investigadora de los actos del Gobierno en relación con los impactos del Covid-19 en el país.
Durante la instancia en la Cámara de Diputados, el presidente de la comisión, el diputado Jaime Mulet (FREVS) le consultó al titular del Minsal sobre un reportaje donde se señalaba que el virus ha tenido una letalidad cuatro veces mayor en Cerro Navia que en Vitacura.
Paris descartó la relación entre letalidad y pobreza, explicando que “no se ha producido -en Chile por lo menos- una diferencia por realidad socioeconómica en tasas de mortalidad”.
Consultado el Minsal, señalan que la afirmación hace alusión al último estudio del Instituto Respublica, que efectivamente así lo establece, bajo el título “Letalidad del Covid-19 y Pobreza Multidimensional en Santiago: No hay relación”.
Sin embargo, Cristóbal Cuadrado, académico de la Universidad de Chile, a través de su cuenta de Twitter dijo que esto era falso. “¿Se atreverá el Minsal a liberar los datos o publicar un análisis bien hecho para evaluar el impacto del tipo seguro de salud y comuna de residencia en la mortalidad y riesgo de hospitalización por Covid-19 (ajustado por sexo, edad y comorbilidades)?”.
El Fact Checking de La Tercera consultó a Cuadrado sobre su afirmación, el que explicó que "para prácticamente todas las enfermedades que conocemos, existe una gradiente socioeconómica, en que las personas con mayores recursos mueren menos que las de menores recursos. Tanto para mortalidad, como para letalidad”, señala.
El académico de la U. de Chile explica que “esto es algo, tan, pero tan establecido, que hay libros enteros escritos al respecto. Negarlo es de un nivel de negacionismo como decir que la Tierra es plana”.
Respecto al caso concreto del Covid-19, dijo que “las personas con menor NSE (nivel socioeconómico) tienen más probabilidad de contagiarse porque tienen más probabilidad de exposición (usan transporte público, trabajos más precarios y necesidades materiales que los obligan a seguir trabajando incluso en cuarentena, mayor hacinamiento, entre muchos factores)”.
“Tienen además más probabilidad de morir de Covid-19 que las personas de mayor NSE, debido a que tienen mayores factores de riesgo como diabetes, hipertensión, problemas cardiovasculares, entre otros”, añadió.
Cuadrado explica que la letalidad es la proporción de personas con Covid que terminan falleciendo debido a la enfermedad y que la tasa de mortalidad es el número de personas que muere por la enfermedad por cada 100.000 habitantes.
“Todas estas cosas son tan pero tan obvias, que lo que dice el ministro es una verdad insultante. El Minsal convenientemente no ha liberado los datos para poder hacer este análisis de manera adecuada, teniendo la información para hacerlo", argumentó Cuadrado.
Agregó que, “el estudio más grande del mundo (publicado en Nature), analizó datos de más de 17 millones de personas y casi 11 mil muertes por Covid-19, concluyendo que el principal factor de riesgo para morir por coronavirus, además de la edad, era vivir en zonas de menor nivel socioeconómico (79% mayor probabilidad de morir que personas que viven en zonas de mayor nivel socioeconómico)”, explicó.
Pero por alguna mágica razón, “el ministro Paris pretende hacernos creer que aquí las personas de menor NSE no tienen una mayor probabilidad de morir por Covid-19... Es sencillamente absurdo”, dijo Cuadrado.
Ignacio Silva, infectólogo de la Universidad de Santiago, dijo que se sabe que existe una relación, “pero es difícil determinarlo de manera directa”.
Añade que el nivel socioeconómico tiene un impacto a nivel de nutrición, "que sabemos es un factor que está asociado a la mortalidad por Covid. Por ejemplo, las personas obesas tienen más riesgo de una mala evolución y de una complicación de la enfermedad. Hay personas que tienen menos acceso a salud, menos posibilidad de quedarse en casa, y son personas que se expusieron más al Covid y por lo tanto tuvieron mayor probabilidad de morir. Son un grupo de riesgo”.
¿Volvió el fútbol universitario?
Tras el retorno del fútbol profesional, las universidades (uno de los campeonatos más competitivos del país), retomaron los entrenamientos en modo coronavirus, previo al inicio de las competencias.
Con estrictas medidas de sanitarias y de seguridad, volvieron a la actividad.
En la imagen, la Universidad de los Andes en su cancha, ubicada en San Carlos de Apoquindo, a pasos del estadio de Universidad Católica, en acción.
“Luego de largos siete meses de trabajos vía zoom, nos volvimos a encontrar en nuestra casa, la cancha de la universidad, siguiendo todos los protocolos y medidas sanitarias para disfrutar de lo que amamos, cuidándonos entre todos”, señala la publicación.
Los jugadores realizaron los trabajos de precalentamiento con distanciamiento social, y trabajos de fútbol con balón en grupos reducidos, con el objetivo de minimizar el riesgo de contagio entre el plantel.
Todos los implementos empleados por los dirigidos por Cristóbal Oviedo, fueron sanitizados antes y después de utilizarlos.