La vacunación ya no es recomendada para mujeres embarazadas
Si bien Reino Unido recomienda las vacunas contra el Covid-19 para las mujeres embarazadas, desde fines de agosto que distintos usuarios en redes sociales han señalado que esto habría cambiado de rumbo abruptamente. Sin embargo es falso; las afirmaciones se derivan de una mala lectura de la guía publicada casi dos años antes del lanzamiento de la vacuna y no reflejan la posición actual del gobierno del Reino Unido.
Una persona establece: “ÚLTIMA HORA: el Reino Unido ya no recomienda la vacuna de ARNm CV19 de Pfizer-BioNTech para mujeres embarazadas”, dice un tuit del 29 de agosto de 2022 con decenas de miles de interacciones. “Además, recomiendan que las mujeres en edad fértil deben descartar la sospecha de embarazo antes de la vacunación”.
La publicación, de una cuenta que desde entonces ha sido suspendida, provocó una ola de reclamos, tanto en Twitter, Facebook y Telegram.
Funcionarios de salud y expertos independientes dijeron a AFP que el Reino Unido aún recomienda que las mujeres embarazadas se vacunen contra el Covid-19. “El consejo no ha cambiado”, dijo Victoria Male, académica titular de inmunología reproductiva en el Imperial College de Londres.
Como evidencia, las publicaciones en las redes sociales apuntan a una sección en un informe de la Agencia Reguladora de Medicamentos y Productos para el Cuidado de la Salud (MHRA) del Reino Unido titulado “Resumen del Informe de Evaluación Pública para la Vacuna Covid-19 Pfizer/BioNTech”.
“Se considera que en este momento no se puede garantizar suficientemente el uso seguro de la vacuna en mujeres embarazadas; sin embargo, se podría respaldar el uso en mujeres en edad fértil siempre que se recomiende a los profesionales de la salud que descarten un embarazo conocido o sospechado antes de la vacunación”, dice la sección etiquetada como “conclusiones de toxicidad”.
Pero esa parte del documento se remonta a diciembre de 2020, según muestra una versión archivada de la página web. La MHRA ratificó a AFP que su última guía indica que las vacunas “son seguras de usar durante el embarazo y la lactancia”.
Viruela del mono podría generar problemas mentales
Los casos de viruela del mono, una enfermedad zoonótica viral identificada por primera vez en humanos en 1970, han aumentado considerablemente en el mundo desde mayo último con manifestaciones cutáneas en la mayoría de los casos.
Los síntomas más comunes, como mialgia, dolor de cabeza y fatiga, estarían relacionados con respuestas inflamatorias desencadenadas por esta enfermedad infecciosa.
Un nuevo estudio científico advierte que los efectos neuropsiquiátricos pueden representar otro componente de las secuelas, aunque estas manifestaciones no han sido completamente caracterizadas o reportadas consistentemente.
“Solo hay datos mínimos que describen las manifestaciones neurológicas y psiquiátricas de la viruela del mono, lo que contribuye a una brecha significativa en el conocimiento sobre las manifestaciones de la enfermedad. Los síntomas más comunes de mialgia, dolor de cabeza y fatiga probablemente se deban a las respuestas inflamatorias desencadenadas por enfermedades infecciosas, como es también esta enfermedad”, explica Ian Lipkin, profesor de epidemiología John Snow y director del Centro de Infecciones e Inmunidad de Mailman de la Universidad de Columbia y School of Public Health de Nueva York.
Un análisis publicado en medRxiv, muestra que de 19 estudios con una cohorte combinada de 1.512 pacientes (44,8 % mujeres) con viruela del mono, las características neurológicas más prevalentes incluyeron síntomas neurológicos inespecíficos como mialgia (55,5 %), dolor de cabeza (53,8 %), fatiga (36,2%) y confusión (2,4%). Además, se informaron síntomas más raros pero graves, como convulsiones (2,7 %) y encefalitis (2,0 %).
Las manifestaciones neurológicas no elegibles para el metaanálisis incluyeron síntomas psiquiátricos como ansiedad y depresión, además de trastornos de la percepción sensorial como visión alterada, mareos y fotofobia. Los hallazgos de este metaanálisis se consideran preliminares. Sin embargo, los investigadores escribieron que la incidencia observada de “manifestaciones del sistema nervioso relacionadas con la viruela del mono puede justificar tanto la vigilancia dentro del brote actual de viruela del mono como métodos sólidos para evaluar la causalidad potencial”.
Lipkin señala que la ansiedad y la depresión pueden reflejar en gran medida los estigmas sociales y físicos asociados con “una enfermedad infecciosa dolorosa y potencialmente desfigurante, más que el proceso de la enfermedad en sí”.
“Hay mucho que no sabemos sobre la patología de la viruela del mono o sus secuelas a largo plazo. Hasta la fecha, solo hubo complicaciones neurológicas muy raras asociadas con la viruela del simio”, añade el doctor Brouwer McEntire, que participó del estudio.
Dada la rareza de las manifestaciones neurológicas en pacientes con la enfermedad y la evidencia limitada disponible sobre este tema, también hay muy poca orientación sobre cómo mitigar el riesgo de efectos neurológicos en pacientes que se infectan. “Al igual que con muchas de estas cosas, la forma más efectiva de prevenir las manifestaciones neurológicas de la enfermedad será fomentar medidas de salud pública que prevengan su propagación. Eche un vistazo a Covid-19, donde incluso después de dos años y extraordinarios esfuerzos públicos en todo el mundo, hemos logrado un progreso increíble y todavía no tenemos una cura”, sostiene McEntire.