El cambio de hora en nuestro país se llevará a cabo esta noche. Cuando sean las 23:59 horas tendremos que atrasar nuestros relojes en una hora.
Daremos así inicio al horario de invierno, el cual es definido por muchos especialistas como aquel que mejor se acomoda al cuerpo humano y sus ciclos de sueño.
La Dra. Catalina Torres, neuróloga del Centro del Sueño de Clínica Santa María, explica: “Vamos a poder comenzar el día con mayor luminosidad, lo que disminuye la somnolencia y nos facilita el poder estar más alerta, es decir, corresponde a un horario que está más ajustado a lo que son nuestros ciclos hormonales y fisiológicos, denominados ritmos circadianos”.
Hoy se cambia la hora en el país: estas son las 10 claves según 6 doctores
Aun así, pasar del horario de verano al de invierno no es tarea fácil. Es un proceso de adaptación física y neurológica. Para no tener consecuencias negativas en nuestro organismo, hay que organizarse y evitar enfrentarlo improvisadamente. Estas son las 10 claves para enfrentarlo de mejor manera.
1. Sergio Juica, neurólogo de Clínica Biobío, asegura: “Para alguna población sana, probablemente adulta, una hora de cambio se va a adoptar rápidamente, en dos o tres días. Sin embargo, para poblaciones más extremas, es decir, los adultos mayores o los niños, incluyendo pacientes con enfermedades neurológicas, se van a ver mucho más afectados y el proceso de adaptación va a ser más lento”.
2. Enzo Rivera, neurólogo del Centro del Sueño de Clínica Ciudad del Mar, recomienda prepararse con antelación: “Lo ideal es comenzar con tres semanas de anticipación, donde los menores se deben dormir y levantar media hora antes de lo habitual. Si todo va bien, la segunda semana se adelanta otros 30 minutos más y la tercera lo mismo. Si se necesita realizar una adaptación más rápida, se puede hacer cada cuatro días, pero es muy importante que este cambio sea gradual”.
3. Katherin Falck, directora de Calidad y Gestión de Riesgo de Help, enfatiza en la importancia de mantener, a largo plazo, una buena higiene de sueño: “Significa tener un horario fijo para dormir y para despertarse, tratar de dormirse antes de las 11 de la noche, no hacer ejercicios intensos antes de acostarse y disminuir todo lo que genere luz dentro de la habitación”.
4. Evelyn Benavides, neuróloga y especialista en Medicina del Sueño de Clínica Dávila, complementa: “Se debe evitar consumir alimentos o productos estimulantes antes de dormir y tomar siestas, la idea es poder realizar actividades que favorezcan el buen descanso como escuchar música suave, leer o hacer terapias de relajación, dejando con antelación pantallas luminosas como televisión, computador o celulares previo al descanso nocturno”.
5. Paola León, neuróloga infantil Clínica Dávila Vespucio, aconseja: “Tener rutinas bien claras en donde los niños se duerman no más allá de entre las 8 y las 9 de la noche, regular el uso de pantallas para que no sean hasta tan tarde y tener una habitación con temperaturas adecuadas”.
Hoy se cambia la hora en el país: cómo ayudar a los niños a ajustarse
Jonathan Martínez Líbano, director del Magíster en Educación Emocional y Convivencia Escolar de la Facultad de Educación y Ciencias Sociales (FECS) de la Universidad Andrés Bello (UNAB), brinda un análisis detallado sobre cómo el cambio de horario puede afectar a los niños, además ofrece consejos prácticos para ayudarles a adaptarse de manera más suave a esta transición.
Con la llegada del cambio de horario en Chile, surge la preocupación sobre cómo esta modificación puede afectar a los más pequeños. Martínez Líbano,, destaca los principales efectos que este cambio puede tener en los niños y plantea algunas estrategias para ayudar a los niños a ajustarse al cambio de horario de manera más suave, tales como:
6. Ajuste gradual de horarios: Comenzar a ajustar gradualmente los horarios de sueño de los niños unos días antes del cambio de hora. Esto puede hacerse adelantando o retrasando la hora de acostarse y de levantarse en incrementos de 15 a 20 minutos cada día. Este enfoque gradual ayuda a que el reloj biológico del niño se sincronice de manera más natural con el nuevo horario.
7. Actividades relajantes antes de dormir: Incorporar actividades relajantes en la rutina nocturna, como leer un libro, escuchar música suave o ducha caliente, para ayudar a los niños a relajarse y prepararse para dormir.
8. Establecimiento de rutinas regulares: Establecer rutinas regulares para las comidas, el juego y el sueño, ya que proporciona un sentido de previsibilidad y seguridad para los niños durante períodos de cambio. Además, evitar la exposición a pantallas electrónicas al menos una hora antes de dormir, ya que la luz azul emitida por estos dispositivos puede interferir con la producción de melatonina, la hormona del sueño.
9. Exposición a la luz natural y actividad física: Durante el día, fomentar la exposición a la luz natural y la participación en actividades físicas al aire libre puede ser beneficioso para reajustar el reloj biológico de los niños y promover un estado de ánimo positivo.
10. Apoyo emocional: Brindar apoyo emocional clave para los niños. Los padres y educadores deben mostrar paciencia, comprensión y empatía, reconociendo y validando los sentimientos de los niños. Hablar con ellos sobre el cambio de horario y cómo puede afectarles, y asegurarse de que se sientan escuchados y apoyados, puede hacer una gran diferencia en su capacidad para adaptarse.
Con el apoyo emocional adecuado y la implementación de estas estrategias prácticas, podemos garantizar que los niños mantengan su bienestar físico, emocional y académico durante este período de cambio.