Este sábado a las 20:36 horas, un sismo de magnitud 7.0 a 210 Kms de la Base Frei en la Antártica, generó una alerta por parte de la Oficina Nacional de Emergencia del Ministerio del Interior (ONEMI) que arribó por error a gran parte de los teléfonos móviles del país, gracias al Sistema de Alerta de Emergencias (SAE) del mismo organismo.

Sin embargo, coincidentemente, 31 minutos más tarde, otro fuerte sismo a una magnitud de 5,9 se sintió en la zona central del país, 14 km al este de Farellones, generando confusión entre la población.

Entonces, ¿es posible que el sismo en la Antártica, a unos 2.400 Kms de Santiago, haya desencadenado el sismo en la zona central?

El geofísico Cristian Farías Vega, doctor en Geofísica de la Universidad de Bonn en Alemania y director del Departamento de Obras Civiles y Geología de la Universidad Católica de Temuco, señala que “no hay argumento alguno para afirmar que exista una causalidad entre uno y otro fenómeno. Si tenemos un terremoto magnitud 7.1, está muy lejos de Santiago como para poder gatillar otro en magnitud 5.5. De hecho, nadie sintió el sismo de la Antártica en la zona central, así que fue sólo una coincidencia que además se vio incrementada por la falsa alarma de la Onemi”.

Farías, quien a mediados de 2020 publicó un estudio de cómo el sismo de Illapel de 2015 afectó a un grupo de volcanes en el sur a 600 Kms de distancia, apunta que “no pueden estar ligados no sólo porque están muy lejos, sino también sistemas de placas y fallas distintos. La única manera que tenemos para ligarlos es que uno gatille a otro -porque ocurre y se ha visto- pero la distancia es demasiada. Esto nos lleva a afirmar que el sismo de Santiago iba a ocurrir, y el otro también. Pasó que ambos fueron seguidos en una misma ventana de tiempo, y sólo le pusimos atención al de la Antártica a causa de la alarma fallida de la Onemi”.

“En el caso de Illapel y los volcanes del sur, fue muy distinto. El sismo era al menos 32 veces más grande y la onda sísmica más brutal”, sostiene.

Alerta fallida

En cuanto a la alerta SAE de la Onemi, el sistema inaugurado en 2014 tiene como objetivo enviar información a los teléfonos que cuenten con el sello de compatibilidad, a través de un mensaje vinculado a riesgos de tsunami, sismos de mayor intensidad, erupciones volcánicas e incendios forestales con amenaza a viviendas.

De acuerdo al organismo, dicha alerta masiva, despachada automáticamente vía texto a una zona georeferenciada -salvo la falla de hoy-, no se ve afectada por la congestión de las redes celulares, dado que utilizará otros canales de frecuencia para llegar a los teléfonos de forma segura. A partir de marzo de 2017, todos los equipos celulares comercializados en el país, independiente de su operador, son compatibles con este sistema.

En cuanto a la falla, la Onemi aseguró que “la activación del Sistema de Alerta de Emergencia para celulares sólo correspondió para la zona Antártica debido al sismo de magnitud 7.6 que se registró a las 20.36 a 216 km al NE de la base O´Higgins. Por ello solo dicha zona debe realizar el abandono de la zona de playa”, y que los equipos técnicos se encuentran investigando el envío del mensaje a nivel nacional.