Juan Höfer, bitácora de un científico en la Antártica: El principio del fin

Hoy escribo estas líneas doblemente triste. Por un lado, nuestro tiempo aquí se acerca a su fin y en breve partiremos rumbo al sur del sur. Por otro, me he dado cuenta de que estos parajes que tanto quiero están comenzando a desaparecer de forma muy acelerada. La especie humana es implacable y en nuestro afán por dominar la tierra la estamos destrozando.

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Imagen de cómo la bahía Collins ha ido perdiendo su cubierta de hielo.[/caption]

Este año al llegar todos los veteranos pudimos comprobar que la nieve está casi ausente y los glaciares que estudiamos se encuentran retrocediendo y desestabilizándose a un ritmo alarmante. Paredes que antes llegaban al agua empiezan a estar sobre tierra.

Todos estos cambios tienen variadas e imprevistas consecuencias que afectarán a cómo funcionan estos ecosistemas, pero ahora mismo no puedo pensar en otra cosa que la enorme tristeza que siento al ver cómo el cambio climático está afectando esta zona de la Antártica (ilustrar esta parte con las dos fotos que envío).

Es muy difícil ver él o los cambios del clima en el día a día. Sin embargo, la huella humana se siente de más formas. Ayer salimos a pasear y en nuestro recorrido por la elefantera pudimos ver multitud de plásticos a nuestro alrededor. Tanto que da verdadero pánico. Si aquí, que casi no hay presencia del hombre, la situación está tan mal, me pregunto en qué estado se encontrarán las costas densamente pobladas como las del Mediterráneo o el Sudeste Asiático. Da miedo y vértigo hacer la extrapolación.

La verdad es que, después de recoger 12 kilos de basura en un paseo de cuatro horas por la Isla del Rey Jorge no tengo fuerzas ni ganas de escribir más.

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La impresionante cantidad de basura que se genera en la Antártica.[/caption]

Siento dejarles con tan mal sabor de boca, pero la idea de la bitácora es compartir mis experiencias y hoy siento desasosiego, preocupación y mucha tristeza. El tiempo se nos acaba y si no cuidamos mejor lo que tenemos vamos a perderlo todo. Eso será todo hasta que regrese de vivir con mis amados pingüinos por dos meses en la isla Doumer.

Hasta la vista.

* El Dr. Juan Höfer, es oceanógrafo del Centro de Investigación Dinámica de Ecosistemas Marinos de Altas Latitudes (IDEAL) de la Universidad Austral de Chile (UACh) y académico de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso (PUCV).

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