La distancia promedio entre la Tierra y la Luna son 384.000 km, pero debido a que su órbita es elíptica, ésta varía y en su punto más cercano puede estar a 351.000 km de nuestro planeta y 406.000 km en el punto más lejano.
Cuando está en su punto más cercano, hace que el satélite se vea entre un 7% más grande y un 15% más más brillante y es lo que se conoce como Superluna.
Y eso es precisamente lo que sucederá esta noche: la Luna estará a una distancia de nuestro planeta entre 351.000 y 355000 km.
Aunque el tamaño es relativamente similar al que habitualmente vemos, lo que verdaderamente marca la diferencia para un observador ocasional y convierte a una Superluna en un objeto astronómico especial, es su brillo. Eso mejora notablemente su visibilidad.
“La luna se mueve alrededor de la Tierra en una órbita elíptica, hay un punto de la órbita que está más cerca y hay un punto que está más lejos. La diferencia no es mucha, entre 360 y 400 mil kilómetros. Cuando la luna está más cerca hace que se vea 17% más grande. Si en ese momento coincide con la luna llena, entonces uno habla de una superluna”, explica Cristóbal Espinoza, doctor en Astronomía y Astrofísica de la Usach.
“Se verá muy ligeramente, más grande o brillante que una Luna llena normal, debido a que su órbita es ligeramente elíptica y en esta oportunidad la Luna llena se da en uno de los puntos más cercanos a la Tierra (algo bastante normal, de hecho, la siguiente Luna llena del 13 de Julio también será una “Super Luna”), explica Juan Carlos Beamin, astrónomo y académico de Universidad Autónoma.
La Luna ya está en su fase llena desde la salida del domingo y lo seguirá hasta la puesta del miércoles, según la Nasa. Alcanzará su punto entre esta noche y el martes.
El plenilunio, explica Beamin, es decir, cuando la Luna estará más iluminada, será la madrugada del 14 de junio, “así que el mejor momento para observar el fenómeno es esta noche”, señala el astrónomo.
Aunque la Súperluna se puede ver desde cualquier punto en que el cielo esté despejado, se recomienda que los observadores busquen un horizonte despejado y eviten áreas con edificios altos y luces brillantes, o con accidentes geográficos como cerros o bosques.
Luna de miel
Esta Luna llena tiene varios nombres. En Europa se conoce como Luna de miel o Luna de aguamiel, y se cree que debe su apodo a que según los registros históricos, a que en esta fecha la miel de las abejas estaba lista para ser cosechada. Como además esta fecha coincide con el mayor número de matrimonios en esta zona, su nombre luego se utilizó para denominar a las parejas recién casadas.
En Estados Unidos se conoce como luna fresa, el nombre con que algunos pueblos indígenas del noreste del país, como las comunidades algonquina, ojibwe, dakota y lakota, le daban por coincidir con el inicio de la primavera y la germinación de las frutillas y de otras frutas, que estaban listas para ser cosechadas. El pueblo haida también la denomina Luna madura de las bayas, por la misma razón.
En oriente, en la cultura hindú, este espectáculo celestial se celebra con un festival denominado Vat Purnima, una celebración en la que las mujeres casadas atan un hilo ceremonial alrededor de una higuera y ayunan para rezar para que su cónyuge viva una larga vida.
Los budistas la bautizaron Luna Poson Poya, por la festividad que celebra la introducción del budismo en Sri Lanka en el año 236 a.C.
Durante 2002 habrá otras seis lunas llenas, la primera de ellas, otra Súperluna. Este es el calendario, con el nombre que algunas culturas le asignan:
- 13 de julio: Buck moon (llamada así por crecida de las astas de los ciervos en América del Norte)
- 11 de agosto: Luna de esturión
- 10 de septiembre: Luna de cosecha
- 9 de octubre: Luna del cazador
- 8 de noviembre: Luna castor
- 7 de diciembre: Luna fría
Estos son los nombres populares asociados con las lunas llenas mensuales, pero el significado de cada uno puede variar entre las tribus nativas americanas.
