El secretario ejecutivo de la Convención Marco de Cambio Climático de la ONU, Simon Stiell, ha denunciado que la comunidad internacional está dando pequeños pasos “de bebé”, “demasiado lentos”, en un mundo “inestable y carente de resiliencia” para encontrar las mejores respuestas a los complejos impactos climáticos y ha solicitado que todas las partes aceleren la acción, muestren su compromiso y sean claros y transparentes porque el mundo les hará “rendir cuentas de lo que hagan o dejen de hacer”.
Así lo ha manifestado en su discurso de bienvenida a los asistentes la XXVIII Cumbre del Clima en Dubai (Emiratos Árabes Unidos) donde ha incidido en la importancia de poner en marcha la acción climática después del año “más caluroso jamás vivido por la humanidad” en la que se batieron “muchísimos récords aterradores” que se están pagando con vidas y con los medios de subsistencia de la población.
Así, parafraseando al secretario general de la ONU, Antonio Guterres, ha reiterado que el planeta está “al borde del precipicio”. Stiell ha urgido a hacer más para que “todos” los habitantes del planeta estén seguros, financiar “adecuadamente” la transición ecológica, incluida la respuesta al mecanismo de pérdidas y daños, apostar por un nuevo sistema energético y poner fecha al final de la era de los combustibles fósiles.
“Pasos de bebé”: la última denuncia de la ONU en materia climática
No obstante, ha asegurado que “si la transición no es justa, no se hará ninguna transición”. Eso, en su opinión, significa justicia entre los países; compartir beneficios en toda la sociedad; garantizar que todos en su diversidad tengan las mismas oportunidades para beneficiarse de estas transiciones.
Stiell ha recordado a los países los próximos hitos de la acción climática internacional. Así, ha incidido en que en 2024 deberán presentar su primer Informe Bienal de Transparencia por lo que ya no podrán ocultar la realidad del progreso individual y que en la CO29 acordarán como financiar el nuevo objetivo de finanzas.
Además, ha querido que la apertura de la COP28 sea “el primer aviso oficial” de que a principios de 2025 los países deberán presentar sus nuevas contribuciones determinadas a nivel nacional, por lo que ha instado a que empiecen a trabajar “ahora” en ellos.
En un horizonte posterior, se ha referido a la COP30 en la que cada uno de los compromisos en financiación, adaptación y mitigación deberán estar “en consonancia” con un mundo de 1,5ºC de límite de incremento global de temperatura.
La última denuncia de la ONU a la comunidad internacional en materia climática
“La ciencia nos dice que quedan unos seis años antes de agotar la capacidad del planeta de afrontar nuestras emisiones antes de que explotemos ese limite del 1,5ºC”, ha advertido Stiell que advierte de que no sirve solo con intentar la acción climática, porque la sociedad actual está endeudada con los más jóvenes.
El secretario ejecutivo ha solicitado asimismo a las partes de la Convención Marco de Cambio Climático, 198 países, que sean “transparentes” entre las acciones y decisiones que se adopten porque para cumplir las promesas el sistema climático ha reformado su sistema con una lista pública en la que se ve los pasos de cada país y el mundo les harán rendir cuentas de lo que hagan o dejen de hacer.
“De nada sirve intentarlo, o lo haces o no lo haces”, ha sentenciado Stiell, que ha apelado de nuevo a la responsabilidad de los países y conviertan su acreditación en la COP28 en “una acreditación de honor”.