Un “unicornio inmunológico”: el sorprendente descubrimiento de un laboratorio que analizaba el coronavirus
Un grupo selecto de investigadores descubrió una muestra de Covid-19 con una particular característica que impresionó a los expertos.
Un laboratorio de alta seguridad en Sidney, Australia, trabajaba con muestras de sangre e hisopos que contenían Covid-19. Mientras analizaban las muestras, el virólogo Stuart Turville, profesor asociado del Instituto Kirby de la Universidad de Nueva Gales del Sur encontró lo que denominó “un hermoso unicornio inmunológico”.
La peculiar muestra contenía, según Turville, “la respuesta al coronavirus más asombrosa que jamás haya visto”.
El “unicornio” pertenecía a un padre de 50 años llamado Damian que vive en la costa central de Nueva Gales del Sur que desarrolló indicios del virus en marzo. Sus síntomas eran lo suficientemente graves como para llevarlo a emergencias del hospital, sin embargo, después de recibir oxígeno lo enviaron a su casa el mismo día. Curiosamente, cuando se le hizo la prueba para confirmar la infección con el hiposo nasal de PCR, el examen siguió arrojando un resultado negativo para Covid-19.
“Cuando lo diagnosticaron inicialmente, no pudieron encontrar el virus en su área nasofaríngea, así que siguieron frotándolo, sin encontrarlo. Damian seguía diciéndoles: ‘miren, yo estoy enfermo, mi hijo lo tiene, yo debo tenerlo’. Y cuando los doctores miraron las muestras de sangre, confirmaron que efectivamente el paciente tenía la enfermedad, afirmando que tenía una de las mejores respuestas inmunes”, explicó Turville sobre el particular hecho.
El experto mencionó que la mayoría de las personas desarrollan una “aceptable” respuesta inmune. No obstante, el sistema inmunológico de Damian es de 100 a 1.000 veces mayor que lo normal.
La peligrosa tormenta de citoquinas
Los pacientes que presentan una respuesta inmune particularmente sólida al Covid-19 generalmente terminan en una sala de cuidados intensivos debido a que el sistema inmunológico reacciona de forma excesiva en lo que se denomina como una “tormenta de citoquinas”, proteínas que pueden desencadenar una respuesta inflamatoria tan agresiva que no solo atacan a las células del virus, sino que también destruyen las células de los vasos sanguíneos, el tracto urinario y órganos, lo que conduce a una insuficiencia orgánica y, a veces, la muerte.
Sin embargo, por alguna razón, la respuesta de Damian a pesar de ser fuerte, no provocó una “tormenta” tan agresiva.
La reacción inmune del padre de 50 años no es solo duradera, sino que no se ha debilitado en demasía con el tiempo, ofreciéndole una constante y potente protección contra el coronavirus, acción poco vista por los expertos.
Un estudio de Public Health England descubrió que, si bien la mayoría de las personas que tuvieron coronavirus están protegidas de la reinfección durante al menos cinco meses, estos individuos todavía podían albergar altos niveles de virus en la nariz o en la boca, y por lo tanto, podrían convertirse en agentes para transmitirlo a los demás.
Después que se le informara de su calidad de “unicornio” a Damian, este se ha ofrecido a la investigación médica y su caso ha sido documentado en la literatura científica como parte de los respondedores de “élite”. El virólogo Stuart Turville estima que el hombre ha donado sangre y plasma más de 15 veces.
Cientos de australianos como el padre de 50 años han donado sangre para que su plasma repleto de anticuerpos pueda separarse y usarse para hacer lotes de suero para administrarlo a pacientes gravemente enfermos de todo el mundo para tratar la enfermedad.
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