En los últimos años nos habíamos acostumbrados a tener un noviembre caluroso, sin lluvia y con temperaturas de verano. Sin embargo, este 2023 trajo consigo cifras récord de precipitaciones en Santiago y la zona central.
Justamente, cuando el undécimo mes del año ya pasó la mitad, y queda casi un mes para el inicio del verano, éste ha registrado ya dos extraños y atípicos eventos de precipitaciones. Sin embargo, éstos parecen haber quedado en el pasado, ya que Santiago y la zona central se aprontan a jornadas de mucho calor en los próximos días y semanas.
Santiago se apresta a vivir otro evento climático extremo
La nueva historia de calor en Santiago comenzará con fuerza este domingo, por lo que presenciaremos otro evento climático extremo, aunque diametralmente opuesto. La Dirección Meteorológica de Chile (DMC) indica que desde hoy, y durante los próximos días, las temperaturas bordearán los 30°C, con cielos despejados, variando a nubosidad parcial.
AccuWeather también señala que el registro estará en torno a 30°C, situación que se extenderá durante toda la próxima semana, sobre todo el fin de semana. Incluso, la semana subsiguiente el fenómeno sería aún mayor, llegando incluso a 33°C.
The Weather Channel establece que durante los próximos días, y hasta fin de mes, las máximas no bajarán de 25°C, llegando a 28° y 29°C. Similar diagnóstico climático de Meteored, que señala que en la última quincena de noviembre, las máximas no descenderán de 25°C, con varias jornadas en torno a 28°C y 29°C.
Este escenario de calor ocurrirá en un noviembre considerado el más lluvioso de los últimos 13 años (a la fecha), superando a 2015 (5 mm), pero aún lejos de 2010, que alcanzó 37 mm de lluvia. En 2021, 2020, 2019, 2018, 2017 y 2016 no llovió. Eso si, y lo que es un detalle importante, al presente mes todavía le quedan 20 días de desarrollo, por lo que el registro podría seguir aumentando.
Raúl Cordero, climatólogo de la Universidad de Santiago, explica que “el récord histórico absoluto de precipitaciones para noviembre es de 1978 con 82 mm, seguido por 2004 con 59 mm”.
“Con las precipitaciones registradas durante noviembre, se superaron los 300 mm en lo que va a corrido del año, lo que no sucedía desde 2008. Santiago rompió una alarga racha de 14 años con déficit de precipitaciones, dando fin estadístico a la megasequía en la capital. Noviembre de 2023 ya es el séptimo mes de noviembre más lluvioso registrado en la capital en los últimos 70 años”, indica el climatólogo.
Santiago se apresta a vivir intensas jornadas de calor: la otra cara de la moneda
La primavera meteorológica 2023 (septiembre, octubre y noviembre) entró en el top 5 de primaveras más lluviosas registradas en la capital desde 1950. “Es de hecho, la primavera más lluviosa ya desde el año 2000, es decir, tenemos la primavera meteorológica más lluviosa en 23 años”, agrega.
Además de lo descrito en Santiago, el fenómeno se ha extendido por diferentes partes de Chile, como La Serena, Valparaíso, Santiago, Talca, Chillán, Concepción y Torres del Paine, entre otras zonas.
“No es poco frecuente que se registren precipitaciones en varias zonas del país al mismo tiempo, pues en Chile las precipitaciones están asociadas a la llegada de sistemas frontales. Sin embargo, es bastante menos frecuente que las precipitaciones se registren al mismo tiempo en la zona centro, centro sur, Patagonia, y norte de la península Antártica. Se trata de una coincidencia favorecida por una configuración sinóptica particular poco frecuente”, explica Cordero.
Y como si eso fuera poco, también se han presentado tres fenómenos adicionales, generando una extraña conjunción climática: vaguada en altura, circulación ciclónica e inestabilidad postfrontal.
Cordero señala que las precipitaciones este año han estado muy probablemente favorecidas por el fenómeno de El Niño. “Este calentamiento anómalo en la temperatura superficial del pacífico tropical oriental, ayuda la presencia de lluvias en Chile. Las precipitaciones registradas en Santiago este año son muy similares a las que se evidenciaron en la capital en 2017, cuando se registró por última vez El Niño intenso en la zona 1+2 (la que afecta a Chile)″.
“El Niño es un calentamiento anómalo del mar, frente a las costas de Ecuador y Perú. Aunque El Niño ocurra a miles de kilómetros, sus efectos se sienten en Chile y en todo el mundo”, aclara.
Santiago se apresta a vivir otro evento climático extremo: año frío y lluvioso
Ha sido un año extraño en materia climatológica y meteorológica, de eso no hay dudas. A lo descrito durante noviembre, se suma lo sucedido recientemente en octubre, que también se comportó de manera poco habitual, con jornadas de precipitaciones y días fríos.
Justamente, octubre finalizó como uno de los “octubres” más fríos de los últimos años. La temperatura máxima promedio en Santiago fue de 21,8°C, es decir, medio grado bajo la máxima típica para el décimo mes del año, que es 22,3°C, lo que lo posicionó como el más frío desde 2015 (hace ocho años), aunque aún lejos del récord absoluto de octubre de 1953, de 18,1°C.
Cordero establece que no es una coincidencia que octubre haya sido en la zona central relativamente frío. “En la última década los tres meses de octubre más fríos registrados en la capital fueron todos años del fenómeno de El Niño: 2015, 2017, y 2023. Aunque, a pesar de la baja en la temperatura registrada en la zona central en los últimos dos meses, este 2023 se mantiene en el podio de años más cálidos jamás registrados en la capital (entre el 1 de enero y el 30 de octubre), solo por detrás de 2020 y 2016″.
Aunque de todas formas, octubre cerró en la capital con precipitaciones por debajo de valores típicos. “Durante octubre de 2023, las lluvias en Santiago no superan los 5 mm, lejos de los 12 mm considerados típicos. Además, Santiago completó seis años consecutivos con precipitaciones bajo valores típicos en este mes, la última vez que tuvimos un octubre considerado lluvioso en la capital fue en 2017″, añade Cordero.
“De cualquier manera, las precipitaciones de los últimos días del décimo mes del año, fueron suficientes para mantener las lluvias acumuladas hasta la fecha en lo que va corrido del año, muy cerca de valores típicos. Es la primera vez desde que comenzó la larga e intensa sequía que afecta la zona central en 2008, que Santiago llega al último bimestre del año sin déficit de precipitaciones”, sostiene el climatólogo.