Temor, incertidumbre y asombro. Eso es lo que la Inteligencia Artificial ha despertado en la humanidad en los últimos meses. Y es que no se sabe a ciencia cierta los potenciales que tiene, además de que a muchos les preocupa ser reemplazados por la tecnología en sus trabajos actuales.
Sin embargo, lejos de todo lo malo, la IA también tiene una parte positiva: llegó a facilitarnos los quehaceres del día a día y, sin duda, está mejorando nuestras vidas, aunque no lo sepamos. Estas son las formas.
1. La Inteligencia Artificial ayuda a mejorar el pronóstico de las enfermedades
Sabemos que la IA utiliza una infinidad de fuentes de datos para funcionar, especialmente en el subcampo del aprendizaje automático. Esto le permite, de la manera en que un humano no podría o le tomaría demasiado tiempo, identificar patrones complejos.
Es, sin duda, un escenario alentador para la Medicina, porque permite el diagnóstico temprano de enfermedades, como el cáncer, donde la IA puede analizar imágenes y descubrir patrones (que al ojo humano, a veces no se pueden ver) para lograr identificarlo a tiempo.
Pero también ayuda mucho en la prevención de las enfermedades, pues el aprendizaje automático tiene la capacidad de encontrar factores de riesgo, que pueden ser genéticos, de estilo de vida o provocados por agentes contaminantes.
Y como si fuera poco, esta tecnología también puede aprender las distintas respuestas a medicamentos y así determinar qué tratamientos son los mejores para cada paciente.
2. La IA nos ayuda a llegar a lugares y conocer los clientes de un determinado mercado
Puede que no lo sepas, pero Google Maps utiliza Inteligencia Artificial para ayudarnos a buscar los mejores caminos para transportarnos en las calles. Y es que su tecnología analiza datos que después logran avisarnos, por ejemplo, las condiciones del tráfico y los retrasos a partir de ello.
También ayuda a los conductores a encontrar las rutas más eficientes para llegar a sus destinos, ya sea en auto o a pie, “gracias a un sistema que aprendió a leer los nombres de calles y direcciones, a partir de más de 1.000 millones de imágenes de Street View”, explicó Google.
Pero también la IA está apoyando al mercado laboral, ya que permite obtener estadísticas sobre lo que los clientes dicen en redes sociales o qué necesitan, favoreciendo a que los humanos se centren en aspectos más cognitivos, como el pensamiento crítico y el análisis creativo, a partir de esos resultados.
3. La Inteligencia Artificial ayuda a romper las barreras idiomáticas
¿Alguna vez utilizaste el traductor de Google? Si es así, esto significa que utilizaste la IA. Y es que el traductor utiliza esta tecnología para reconocer caracteres, descifrar las palabras y traducirlas.
Este tipo de IA ha sido entrenada con millones y millones de datos para lograr traducir a una decena de idiomas y de forma fidedigna las palabras, oraciones e incluso textos gigantes en segundos y, en su mayoría, hace un buen trabajo.
De esta manera, se rompen las barreras idiomáticas donde antes hubiésemos necesitado pasar horas y horas de clases de un idioma para poder dominarlo y traducir al menos una frase sencilla.