4 señales para identificar a las personas altamente conflictivas, según un experto
El cofundador del High Conflict Institute, Bill Eddy, enumeró aspectos que no son tan evidentes, pero que se presentan regularmente en estos individuos.
Ya sea en el vecindario, en el lugar de trabajo o en otros espacios, es común que se tengan conversaciones con personas que no se conocen mayormente, pero que de alguna manera se presentan durante la rutina.
En ciertos casos, puede que un primer acercamiento evolucione hasta convertirse en una amistad o, incluso, en una relación más profunda en la que prime la cordialidad y el apoyo mutuo.
Sin embargo, hay otros en los que con el tiempo logras darte cuenta de que una persona es altamente conflictiva.
Por supuesto, este último aspecto de la personalidad no siempre es tan evidente.
El especialista del High Conflict Institute, Bill Eddy, quien también es cofundador de dicha empresa dedicada a ayudar a particulares y organizaciones a tratar con personas conflictivas, se refirió a este tópico en un análisis que hizo para Big Think.
Según explicó desde su experiencia como trabajador social clínico y mediador, los individuos altamente conflictivos tienden a buscar “blancos” en los cuales centrar sus críticas y malestares.
“Pueden cambiar con el tiempo, pero ven a esa persona como la causa de todos sus problemas”, enfatizó Eddy, para luego detallar que suelen querer controlarla o humillarla.
En este sentido, explicó que se trata de “una fijación” en la que “todos los problemas de su vida se enfocan emocionalmente en esa persona”.
Para evitar convertirse en ese “blanco”, el experto enumeró 4 señales de advertencia para detectar a individuos con estas características, antes de que se entable un vínculo de mayor intensidad.
“Si las identificas, no te acerques demasiado. Puede ser un amigo, pero no el más íntimo. Puede ser un compañero de trabajo, pero no el más cercano (...) quienes se acercan mucho son quienes corren más riesgos de convertirse en el blanco de sus culpas”.
Y junto con ello, una vez que las hayas detectado, sugirió evitar decirlo directamente y entrar en conflicto con ellas, debido a que “si discutes, no van a cambiar, así que ahórrate la molestia”.
“Puedes limitarte a decir: ‘Vaya, qué interesante. Oye, ahora me tengo que ir’. O algo así”, aconsejó.
A continuación encontrarás las 4 señales que mencionó.
1. Culpan a los demás
Este es el rasgo más evidente, según el especialista.
“Todo es culpa tuya”, “no es mía en absoluto”, “mi parte del problema es cero”, “¿cómo no entiendes que esto es tu culpa?”, son solo algunas de las frases que generalmente ocupan para desligarse de su responsabilidad en una situación.
2. Dividen sus pensamientos en “todo o nada”
Oraciones como “hay gente buena y gente mala” reflejan que tienen una visión primordialmente binaria, a través de la cual analizan los aspectos como “todo o nada”.
Aquello también puede influir en su comportamiento y en sus comentarios, es decir, no presentan matices intermedios.
3. No controlan sus emociones
Puede darse en numerosos casos, aunque no necesariamente en todos, que tengan dificultades para manejar lo que sienten.
“Y eso se puede ver: gente que empieza a gritar o a llorar o que sale enfadada de una habitación; ese tipo de comportamiento es lo que vemos”, precisó Eddy.
4. Tienen comportamientos extremos
En su libro 5 Types of People Who Can Ruin Your Life (TarcherPerigee, 2018), el especialista menciona la “regla del 90 por ciento”.
Aquella hace referencia a que “el 90 por ciento de las personas no hacen algunas de las acciones que hacen las personas muy conflictivas”.
“Así que, si ves algún comportamiento chocante y luego la persona pone una excusa para ello, eso es a menudo la punta del iceberg”, subrayó el presidente del High Conflict Institute.
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