Las aguas del océano Pacífico ecuatorial siguen enfriándose. Estos síntomas de que el fenómeno La Niña está comenzando son indiscutibles, no obstante, la fecha de llegada a Chile y el resto del mundo continúa incierta.
Esta transición del fenómeno El Niño —que nos acompañó durante la mitad del 2023 y el inicio de este 2024— estaría prevista para el próximo trimestre julio, agosto y septiembre, según el pronóstico de la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica (NOAA por sus siglas en inglés).
Esto es lo que se habla en el mundo científico sobre la próxima llegada de La Niña.
El pronóstico de La Niña 2024 en Chile
Según el informe del International Research Institute for Climate and Society (IRI), este próximo julio, agosto y septiembre existe una alta probabilidad (más del 60%) de transicionar a la fase La Niña.
Además, la plataforma especializada en clima Meteored explicó que es probable que una vez que se asiente el fenómeno La Niña, su duración se extendería hasta el primer trimestre del 2025.
Aún así, se cree que su intensidad no será tan fuerte como en otros años. En su punto máximo, La Niña debería marcar una anomalía de -1°C, es decir, una clasificación débil.
Sin embargo, a la fecha los modelos climáticos muestran pronósticos poco consistentes. Y es que hasta hace poco, se creía que La Niña comenzaría con fuerza en el el trimestre mayo, junio y julio y después en el próximo trimestre (junio, julio y agosto), pero todavía no ha sucedido.
De hecho, la presencia de La Niña en Chile se traduciría en pocas precipitaciones. Pero lo que está sucediendo es todo lo contrario.
Según Meteored, dada la incertidumbre de los modelos climáticos, “los pronósticos futuros se abordarán con más incertidumbre que en el pasado”.