Se trata del Model 3, un auto eléctrico de la empresa Tesla, liderada por Elon Musk, que, si bien está a la venta para cualquier persona, está también diseñado para ser aprovechado por personal de la policía por sus características y que las autoridades de algunos condados en Estados Unidos ya están adquiriendo.
Y es que, con una autonomía de 438 kilómetros, una velocidad máxima de 225 kilómetros por hora, y una tecnología bastante desarrollada dentro y fuera del vehículo, lo hace una herramienta significativa a la hora de cumplir labores policiales.
Características del auto policial
En medio de una movilización policial, las autoridades tienen un rango de vista limitado. Pero este vehículo busca ampliar esa mirada para no dejar fuera ningún detalle que pudiese servir en su labor.
Para ello, cuenta con cámaras en la parte superior que tienen reconocimiento facial y, además, otras que se encargan de hacer un seguimiento en tiempo real de los autos que van transitando.
Todas estas imágenes las pueden ver los policías dentro del auto, desde varias pantallas que están ubicadas al lado del volante del auto, donde incluso pueden recibir información adicional gracias a los sensores, como las placas de otros vehículos.
Además, el Model 3 está conectado a la nube, por lo que tendrá una fácil y eficiente conexión con el centro de mando de la policía para mejorar su gestión. También se puede conectar con otros vehículos de las autoridades, como un helicóptero.
Otro detalle es que en la parte del panorámico trasero, tiene una pantalla donde el agente puede mostrar el texto que quiera.
El precio de este Model 3 es de 42,990 dólares (35.829.586 millones de pesos chilenos aproximadamente) el de tracción trasera y 53,990 (44.997.426 millones de pesos chilenos) el de tracción integral de motor dual.
Más beneficios para la policía
Desde la Oficina del Sheriff del Condado de Boulder, en Estados Unidos, explicaron a Infobae que invertir en estos vehículos amplía la vida útil de su flota de operaciones y, por ende, reduce sus costos: “Debido a la simplicidad del diseño y a la ausencia de piezas móviles, también se espera que el Tesla tenga una vida útil mucho más larga”.
Y es que, según datos de la oficina, una patrulla policial tiene una vida media de 5 años y un kilometraje de 169.000 kilómetros, lo que equivale a 19.635 dólares (más de 16 millones de pesos chilenos) en combustible y mantenimiento, en comparación a los 3045 dólares (2 millones y medio de pesos chilenos) que se gastarían con un Tesla.
Además, las patrullas suelen pasar gran parte del tiempo moviéndose en velocidades bajas, frenando y arrancando repetitivamente, por lo que si se trata de un vehículo a gasolina, la inversión aumenta todavía más, al igual que el desgaste del motor.