Así son los nuevos carritos de supermercado que funcionan con IA (y cómo complicarán a los ladrones)

Los carritos de supermercado viejos y destartalados, con ruedas duras y a veces torcidas, están siendo reemplazados por una versión mucho más moderna en distintos países del mundo. No solo el diseño modelo está mejor pensado, sino que los usuarios podrán utilizar una Inteligencia Artificial desde el carrito para ayudarlos en sus compras.

Se trata de los modelos ideados por la startup Caper AI que decidió especializarse en el diseño de los carros de compra inteligentes.

Algunos ejemplares ya están rodando por las tiendas de Estados Unidos, Japón, Suecia y Alemania, y según informaron desde la revista de negocios Fortune, pronto llegarán a España.

Además de asistir a que las compras sean más eficientes y rápidas, los carritos de supermercado con IA también complicarán a aquellas personas que buscan robar en las tiendas.

Así es cómo funcionan.

La experiencia de compras con un carrito de supermercado inteligente es muy distinta a la tradicional: primero, los modelos de Caper Cart tienen una pantalla incorporada que el comprador manejará mientras añade productos a la canasta.

Para empezar a utilizarlos, se deben desbloquear con el celular con un código QR. De esta manera, el carrito se sincroniza con el perfil de la persona, un elemento que asustará en primera instancia a posibles ladrones o personas que quieran mal utilizarlos.

Además, la aplicación del carrito está conectada a la tarjeta del usuario, pues es así cómo pagará los productos directamente (ya no tendrá que pasar por caja necesariamente).

Según explicaron desde Xataka, al registrar su perfil, se bloquea un pequeño abono de seguridad en la tarjeta de la persona (similar a los carritos tradicionales que requieren poner una moneda para poder utilizarlos).

Los carritos —que tienen una capacidad de 155 litros y pesan unos 50 kilogramos— tienen sensores que detectan los productos al momento de ponerlos en la canasta. Una vez dentro, en la pantalla se refleja de qué producto se trata, su precio y otros datos importantes.

Algunos modelos lo hacen de forma automática, aunque hay otros que tienen un lector de código de barras que funcionan similar, pero de forma manual.

La idea, según explicó la startup, es que las personas puedan ser más eficientes, impulsar el autocobro, agilizar los procesos de compra y reducir las filas que se generan en horarios específicos del día.

En todo caso, la empresa mencionó que los carros de compra con IA podrían no adaptarse a todas las personas que van a comprar: algunos podrían no tener disponible un teléfono celular, suficiente batería, una tarjeta asociada o, incluso, podrían tener problemas al utilizar aparatos tecnológicos.

Es por esto que los carritos tradicionales no deberían desaparecer del todo. Solo serían una alternativa más para agilizar el proceso.

Adicionalmente, las pantallas en los carritos podrían ser un canal para entregar ofertas personalizadas a los clientes y para que los usuarios reciban recomendaciones de productos afines a sus estilos de vida.

La empresa Instacart adquirió Caper Cart por 350 millones de dólares en el año 2021. Desde entonces, han distribuido miles de carritos inteligentes a distintos supermercados que manejan.

“Apostamos desde el principio a que los carros inteligentes serían la tecnología ganadora para transformar la experiencia de compra de comestibles en las tiendas, porque es un formato que la gente reconoce y no requiere modernizar toda una tienda con grandes inversiones de capital”, aseguró el CEO de Instacart, Fidji Simo.

Además, instauraron un sistema para llevar las compras de supermercado mucho más allá: hay programas para recompensar a los clientes por sus comportamientos de compra.

“Estamos transformando las compras de una tarea a una aventura”, le dijo la empresa a Fortune .

Este sería el ejemplo de cómo la Inteligencia Artificial puede beneficiar y simplificar tareas para la humanidad, pues le ayudaría a los compradores a saltarse las colas de espera, mientras que las tiendas verían una baja en los robos de sus productos.

Según un informe de la Asociación de la Industria Alimentaria, los supermercados planean aumentar el gasto en tecnologías de IA en un 400% antes de 2025.

Aunque son muchas las soluciones que promete esta tecnología con los novedosos carritos, el camino no está exento de obstáculos (al menos, por ahora).

Por ejemplo, Instacart utiliza la IA de ChatGPT para que los mismos carritos le recomienden recetas a los clientes mientras están comprando, para así comprar los ingredientes necesarios para prepararlos.

Sin embargo, en reiteradas ocasiones, la IA le ha mostrado a los clientes en las pantallas imágenes dudosas, como un pollo con verduras que tenían escamas parecidas a las de un pescado.

Este sería un error de la IA.

Son desafíos similares los que han llevado a que algunos proyectos visionarios terminen por fracasar.

Un ejemplo de ello son las tiendas Just Walk Out de Amazon que hacía que los clientes entraran a la tienda, escogieran sus productos, que eran detectados por cámaras, y que al salir, se les hiciera el cobro automático en la tarjeta de crédito registrada (sin pasar por una caja).

Este negocio fue polémico, pues algunos informes de tecnología revelaron que en realidad no era una IA la que detectaba los productos, sino más de 1.000 trabajadores de la India que estaban pegados mirando las cámaras.

Amazon aseguró que esto no era así, sino que tenían empleados en la India que “aleatoriamente” verificaban los registros para controlar que todo estuviera en orden.