Este fin de semana, la Seremi de Salud confirmó un caso de sarampión importado en un paciente de 42 años, quien había realizado un viaje a Armenia en julio por razones académicas.

Según dio a conocer la autoridad sanitaria en un comunicado, ya se está llevando a cabo la investigación epidemiológica que buscará determinar los contactos con los que ha estado la persona, de manera que puedan iniciar el proceso de vacunación correspondiente y evitar que la patología se vuelva a introducir en el país.

La Seremi de Salud también enfatizó que el caso confirmado corresponde al grupo de riesgo de quienes han nacido en el país entre 1971 y 1981, “que no recibieron dos dosis de la vacuna o que no hicieron la enfermedad”.

“Como Chile interrumpió la transmisión del virus en 1993, verificando solo casos importados, a los viajeros nacidos entre esos años se les indica vacunarse contra el sarampión”, agregaron desde el organismo.

¿Qué es el sarampión y cómo se transmite?

De acuerdo a Mayo Clinic, el sarampión es una enfermedad causada por un virus que se sitúa en la nariz y en la garganta del paciente infectado. Se trata de una patología altamente contagiosa, y si bien lo habitual es que afecte en mayor cantidad a los infantes, también puede ser adquirida por adultos.

La propagación del sarampión puede ocurrir al estar en ambientes donde hay aire contaminado o al tener contacto directo con superficies infectadas. Por ejemplo, si una persona con sarampión tose o estornuda, las gotículas comenzarán a expandirse por el aire y otros que estén cerca podrían inhalarlas fácilmente.

Un factor a tener en cuenta es que este virus es capaz de quedarse en el aire y superficies incluso por dos horas después que el niño o adulto con sarampión se fue de un lugar, advierten los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés). Además, puede contagiar al 90% de los individuos que no tengan inmunidad y que han tenido contacto con un paciente infectado.

Los animales no son capaces de adquirir ni propagar el sarampión, agrega la agencia de salud pública de Estados Unidos.

El sarampión puede ser propagado cuando un paciente infectado tose o estornuda, tras lo cual las gotículas se expanden por el aire y llega a otras personas.

¿Cuáles son los síntomas del sarampión?

Los indicios de esta enfermedad no son inmediatos, puesto que generalmente se presentan desde 7 a 14 días después de haber estado expuesto a la afección. Mayo Clinic plantea que los síntomas más comunes del sarampión son los siguientes:

  • Fiebre alta
  • Tos
  • Dolor de garganta
  • Secreción nasal
  • Inflamación de los ojos
  • Manchas de Koplik, que consiste en pequeñas lesiones de color blanco ubicadas en la cara interna de la mejilla, dentro de la boca
  • Sarpullido en la cara y el cuerpo

La enfermedad tiene varias fases, las que en total duran de 2 a 3 semanas. La primera etapa es de infección e incubación, donde la enfermedad inicia el proceso de expansión por el organismo del paciente. Esto tiene una duración de 10 a 14 días y no se presentan síntomas.

En la segunda etapa comienzan a aparecer los síntomas que más se repiten de este cuadro: fiebre, tos, secreción nasal, ojos inflamados, entre otros. Se extiende por un máximo de 3 días.

Luego llega la tercera etapa, donde se refleja el que quizás sea el indicio más conocido del sarampión, el sarpullido. La erupción se presenta como manchas pequeñas y rojizas con formas irregulares en la piel, dado que algunas pueden ser más abultadas que otras. En primera instancia solo se ve en el rostro, pero luego se va extendiendo a otras zonas del cuerpo, como las manos, los brazos, el pecho y la espalda. Durante este proceso, que se prolonga por 5 días, la fiebre también se eleva.

Sarpullido, tos y secreción nasal son algunos de los síntomas del sarampión.

La cuarta y última fase corresponde a la recuperación del paciente con el virus. Se evidencia una baja en la fiebre y empiezan a desaparecer lentamente los indicios de la erupción rojiza que había en la piel, dando paso a la descamación.

Cabe destacar que durante esta enfermedad también se pueden generar complicaciones de salud más allá de los síntomas generales, como infecciones de oído, diarrea, neumonía y encefalitis. Quienes están más expuestos a padecer esas complicaciones son los niños menores de 5 años, embarazadas, adultos mayores de 20 años y personas con un sistema inmunitario débil.

La prevención

Según la Organización Panamericana de la Salud (OPS), esta afección continúa siendo una de las causas de muerte más comunes en la niñez.

Aunque hasta ahora no hay algún tratamiento específico que pueda combatir el virus, sí hay una vacuna que es capaz de prevenirla, por lo que esto se convierte en una medida fundamental para evitar el contagio.

La inmunización contra esta patología se conoce como vacuna triple viral, puesto que protege de tres enfermedades: el sarampión, las paperas y la rubéola. Con respecto a los niños, los CDC sugieren que la primera dosis de la vacuna sea administrada entre los 12 y 15 meses, y la segunda, entre los 4 a 6 años. En adolescentes y adultos que no han sido inmunizados, se recomienda que sean vacunados lo antes posible.

En Chile, la vacuna contra el sarampión es de carácter gratuito para todas las personas que se encuentren en el territorio nacional. Puede ser recibida en vacunatorios públicos o privados que tengan convenio con la Seremi de Salud.