El 30 de noviembre de 2016, doce labotarorios de todo el mundo se enfrascaron en un inédito experimento, que tenía como objetivo poner a prueba las leyes de la física cuántica descritas por Albert Einstein.
La iniciativa, llamada "The Big Bell Test" www.thebigbelltest.org básicamente buscaba demostrar de forma experimental a través de un videojuego en línea que el mundo microscópico es impredecible y aleatorio, algo que el renombrado físico siempre rechazó.
De acuerdo a Einstein, los resultados de una observación no podían depender de quién lo realizara, es decir, si un objeto es rojo todo observador debe ver a ese objeto de color rojo, algo que se denominó como "realismo local".
Einstein, quien también contribuyó al nacimiento de la mecánica cuántica, conocida como la teoría que analiza el comportamiento de lo más pequeño (lo cuántico), afirmaba que la teoría no permitía predecir de forma exacta los resultados de todos los fenómenos.
Sin embargo, Gustavo Lima, académico del Departamento de Física de la Universidad de Concepción, afirma que según el experimento llevado a cabo en "The Big Bell Test", al menos a nivel cuántico, esto no es así.
Lima es el líder de la investigación, en la sección Chile, y fue parte de los laboratorios que participaron en la iniciativa. En ella, 100 mil personas durante 24 horas seguidas, obtuvieron 56 millones de datos o bits aleatorios, los que posteriormente fueron analizados matemáticamente para refutar la idea propuesta por Einstein, "debido a que no se pudieron predecir los resultados", según Lima.
Por el lado de la mecánica cuántica, esta implica una forma diferente de entender la naturaleza. "No existe ningún modelo que admita el realismo local que sea compatible con las predicciones de la mecánica cuántica. Lo más interesante desde mi punto de vista es que los resultados pueden tener aplicaciones tecnológicas como la generación de números aleatorios, sistemas de encriptación de datos computacionales y envío de información", explica Esteban Sepúlveda, también académico de la Universidad de Concepción.
"El articulo es importante para nosotros no solo por el gran resultado científico obtenido: éste representa el resultado de muchos años de trabajo y dedicación a la física experimental apoyados por una financiación estatal continua. Muestra que el esfuerzo realizado nos ha permitido crear un grupo de científicos y laboratorios capaces de hacer ciencia de clase mundial", concluye Aldo Delgado, académico UDEC y Director del Instituto Milenio MIRO.
Por la Universidad de Concepción participaron los doctores Gustavo Lima y Jaime Cariñe, quienes estuvieron a cargo del experimento a nivel local, mientras que la teoría para este experimento fue elaborada por los también Ph.D Aldo Delgado y Esteban Sepúlveda.