El gobierno de China ha agregado más electrodomésticos a la lista de artículos del programa de intercambio de bienes de consumo, iniciativa que ofrece subsidios gubernamentales a sus ciudadanos con el fin de que reemplacen productos usados por otros nuevos.
La medida es parte de un plan más amplio que busca aumentar el crecimiento económico del gigante asiático, que en el último tiempo se ha enfrentado a numerosos desafíos como una crisis inmobiliaria, altas tasas de desempleo y una demanda de los consumidores cada vez más baja.
Qué electrodomésticos agregó China a su plan de intercambio de bienes
Según informaron desde el gobierno chino, los productos que serán parte de los subsidios gubernamentales pasarán de ocho a doce a partir del 2025.
Los artículos agregados fueron hornos microondas, purificadores de agua, lavavajillas y ollas arroceras.
La lista ya consideraba televisores, teléfonos, tablets, relojes inteligentes, vehículos eléctricos e híbridos. El Estado financia entre un 15% y un 20% del costo original de esos productos.
Otra medida que comenzará a regir a partir de este año es que los consumidores podrán recibir subsidios de hasta 500 yuanes por persona para artículos digitales, como teléfonos.
Fu Jinling, funcionario del Ministerio de Finanzas de China, indicó en una conferencia de prensa que este 2025 se habían asignado 81 mil millones de yuanes (11 mil millones de dólares) para esta campaña de renovación, que pretende estimular la demanda del sector doméstico.
Los efectos del plan de intercambio de bienes de China
Durante el 2024 China, la segunda economía más grande del mundo, dedicó 150 mil millones de yuanes para los subsidios considerados en el plan de intercambio.
Las autoridades han intentado defender el éxito de esta política, que según ellos, ha dejado “efectos visibles”. Esto, puesto que desde que entró en vigencia en marzo del año pasado, se han generado más de 900 mil millones de yuanes en ventas de automóviles y 240 mil millones de yuanes en ventas de electrodomésticos.
Sin embargo, la medida también ha causado preocupación en algunos expertos. Entre ellos está la economista Dan Wang, quien argumenta que los subsidios no son suficientes para “impulsar el consumo”.
Los analistas también se han mostrado temerosos por un posible ciclo inflacionario, que podría generar una menor demanda y precios reducidos, afectando aún más la economía.
“La recuperación del consumo de los hogares dependerá de la estabilización de los precios de los activos, así como de una mayor confianza en las perspectivas de empleo”, detalló Xu Tianchen, economista senior de The Economist Intelligence Unit, según Reuters.