El glaciar Bello está emplazado en el cerro Bello, el lugar de nacimiento del río Yeso. Y fue el lugar escogido por la empresa Suyai para probar Glacier Coolers, un producto diseñado para proteger glaciares. Glacier Coolers es un conjunto de estructuras modulares que se instalan sobre el glaciar.
Clemente Pérez, expresidente de Metro y CEO de Suyai, explica que la estructura se instala en la zona de ablación, lugar donde el glaciar está en proceso de derretimiento. "Si una protege la zona de ablación de un glaciar, protege el resto del glaciar también. Para ello instalamos estructuras modulares cubiertas con geotextiles removibles, que se instalan en verano y se retiran en invierno.
Así evitas la radiación solar y el depósito de polvo (que aceleran el derretimiento). Es una especie de capa protectora temporal, puesta en el lugar clave del glaciar para proteger toda la estructura".
Pérez asegura que los resultados preliminares en el glaciar Bello son alentadores, ya que en la zona donde fueron instalados tuvieron una reducción del derretimiento de 65%. "Las fotos muestran que el hielo alrededor de Glacier Coolers bajó cerca de tres metros. Para el próximo verano queremos hacer uno de una hectárea, con lo que podríamos evitar el derretimiento de 27 millones de litros de agua".
Señala que el proyecto es más efectivo en la zona central del país. "Está enfocado en los glaciares blancos que se están derritiendo más, es decir, glaciares politermales y templados. Estos están básicamente entre Coquimbo y Los Ríos, porque los glaciares fríos, como en el Norte Grande o Torres del Paine, son estructuras menos eficientes". Además, dice, cuando los glaciares son de roca, la misma roca los protege. "Se produce un efecto parecido al que nosotros producimos, que es reducir la radiación solar y la depositación de polvo, proteger el hielo. Hoy retiramos las estructuras y comprobamos su efectividad".
Los Glacier Coolers son elaborados a partir de mallas Acma, cubiertas por capas de geotextil blanco y ancladas a la superficie glaciar por medio de estacas. El diseño es responsabilidad de IEC ingeniería, una de las principales empresas de ingeniería en cálculo del país. Esas coberturas cumplen tres funciones principales: protección contra los depósitos de polvo, reducción de la radiación solar incidente y aislante térmico.
Una vez que las mallas muestren su funcionalidad, Pérez señala que los potenciales clientes son empresas, comunidades e incluso gobiernos. "Este es un emprendimiento con la Fundación Chile y el apoyo de Aguas Andinas, y financiamiento propio. En el futuro, explica Pérez, le puede servir a Aguas Andinas para proteger los glaciares y para tener mayor disponibilidad de agua. Agrega que este proyecto podría favorecer a algunas empresas sanitarias, ya que podría asegurarles el recurso. "Los glaciares en el Maipo se están derritiendo, no quedan para más de 50 años. Es un problema a futuro. Queremos que sea un proyecto para empresas como las sanitarias, mineras que quieran mitigar el impacto ambiental o empresas agrícolas. Hay interés de algunas comunidades para que podamos darles agua. La próxima semana tenemos una reunión con la Dirección de Obras Hidráulicas, esto podría ser una forma más barata de agua para riego. Podríamos apuntar a comunidades, empresas y gobierno", insiste.
Anteriormente se hicieron pruebas piloto en La Parva, en donde se instalaron 32 unidades modulares, confirmando la disminución de la ablación en una superficie cubierta de nieve, la que ahora se confirmó en el glaciar Bello, donde se instalaron 12 unidades modulares.