El Feng Shui es una filosofía milenaria de origen chino que puede ser muy útil para el diario vivir. En términos sencillos, busca aprovechar la energía vital y lograr el equilibrio del entorno que nos rodea, de manera que esto pueda influir positivamente en la salud, el trabajo, el dinero y las relaciones.
Por todo lo anterior, la técnica a menudo se aplica para organizar de cada rincón. Y no se trata únicamente de la ubicación, los colores y la iluminación del hogar, sino que también de todos los objetos que escogemos para dejar en su interior. Entre ellos, las plantas.
Si bien es claro que las plantas conceden frescura y vida donde quiera que estén, de acuerdo a los principios de esta milenaria disciplina, algunas de ellas podrían aportar malas energías a la casa, por lo que es mejor evitarlas.
Qué plantas hay que evitar, según el Feng Shui
1. Hortensias. Esta planta, que es nativa de Asia y América, se caracteriza por la belleza de sus flores y aportar un gran atractivo visual donde estén. Sin embargo, según la filosofía china, representan soledad y aislamiento.
2. Bonsái. Si bien no es tan común en todas las casas, su apariencia exótica puede atraer a algunas personas. Al ser un árbol atrofiado puede atraer la energía negativa, particularmente en lo que tiene que ver con las limitaciones en la vida y los obstáculos para crecer.
3. Espina de Cristo. Esta planta resalta por tener tallos muy espinosos, por lo mismo no es bien vista en el Feng Shui.
4. Planta de Araña. También conocida como mala madre o cinta, esta especie del género Chlorophytum es bastante popular para ubicar al interior de las viviendas. Sin embargo, desde la filosofía china se cree que sus largas y puntiagudas hojas podrían promover energía hostil. Lo mismo ocurre con la llamada Lengua de suegra.
5. Geranios. Se trata de una planta que puede ser sencilla de cuidar y que es resistente a diferentes climas. Desde el Feng Shui se cree que pueden atraer a la mala suerte, por lo que lo mejor es solo dejarlas en el jardín o terraza de la vivienda.