Un adversario astuto. Así catalogaron los especialistas al virus de insuficiencia humana (VIH) después de que se cancelaran los ensayos de la vacuna que prometía evitar el contagio. El ensayo se llama Mosaico y comenzó en 2019, dirigido por la farmacéutica Janssen, parte de la empresa Johnson & Johnson.

Se probó la vacuna en 3900 personas vulnerables al contagio, en más de nueve países de América del Norte, América del Sur y Europa. Esta contenía un mosaico de componentes que estaban destinados a atacar los distintos subtipos del VIH presentes a nivel mundial, no obstante, la respuesta inmune no fue la que se esperaba, pues no se formaron los ansiados anticuerpos neutralizantes que harían efectiva su acción.

“Decepcionante, pero no es el final del esfuerzo para desarrollar una vacuna”, comunicó el doctor Anthony S. Fauci, quien dirigió el Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas de Estados Unidos hasta diciembre del 2022.

Y es que la cancelación de este ensayo, que debía culminar en marzo de 2024, no sorprendió a todos los expertos del mundo científico, pues un estudio de una vacuna similar que se probó en mujeres en cinco países de África -llamada Imbokodo- también se detuvo en 2021 por una respuesta mínima de anticuerpos.

“Decepcionante”: La única vacuna contra el VIH falló en su último ensayo

La importancia de que exista una vacuna contra el VIH

Hoy existen potentes medicamentos, como píldoras orales e inyecciones, que suprimen el virus en individuos infectados hasta dejarlos prácticamente indetectables y no contagiosos.

De hecho, la esperanza de vida del paciente hace 20 años era de 12 a 15 años a partir del diagnóstico, pero en la actualidad es de por lo menos 40 años más a partir del diagnóstico. Sin embargo, estos deben tomarse por el resto de la vida y podrían ser inaccesibles para una gran parte de la población que vive en países donde el tratamiento no está asegurado.

Es por ello que una vacuna sería la forma más económica e ideal para combatir el virus que, tras cuatro décadas desde su descubrimiento, infecta a alrededor de 1,5 millones de personas cada año y mata a unas 650.000.

“La modalidad de prevención definitiva para cualquier infección, en particular la infección viral, es una vacuna que sea segura eficaz”, dijo el doctor Fauci, asegurando que el campo continuará con las investigaciones para lograr su cometido.

“No es que muchas empresas se involucren en vacunas contra enfermedades infecciosas”, aseguró Mitchell Warren, director ejecutivo de AVAC, organización global para la prevención del VIH.

El representante demostró su decepción sobre el fracaso del ensayo, principalmente porque fue financiado por Johnson & Johnson y, según estima, a la larga podría ser difícil encontrar alguna empresa que quiera cumplir ese rol.

“Debería incitar a los legisladores y activistas a pensar en formas de hacer que las herramientas para prevenir el VIH sean más accesibles”, aseveró el activista.