La figura de Brian Mwenda Njagi no para de impactar por estos días en Kenia. El hombre de 28 años ha sido acusado de ejercer como abogado, llegando incluso a presentarse en tribunales y ganar 26 casos diferentes, pese a que no tiene formación jurídica.

El sujeto vio una oportunidad en que su nombre tuviera un parecido con el de Brian Mwenda Ntwiga, quien realmente es abogado en aquel país. Así, Mwenda habría usurpado la identidad del letrado y comenzó a asumir la representación de varios clientes.

En un video publicado en X (antes Twitter), Mwenda negó las acusaciones y agradeció a quienes lo han apoyando.

Y es que en los últimos días su caso ha causado reacciones divididas en la población del país africano, ya que una parte lo defiende por haber defraudado el sistema judicial o el difícil acceso a la educación formal, mientras que otros rechazan tajantemente que haya ejercido como abogado si no tenía las licencias para hacerlo.

Mwenda no despertó sospechas de los jueces o sus representados cuando se presentaba ante los tribunales. Sin embargo, fue un detalle lo que poco a poco lo llevó a ser descubierto.

De acuerdo a medios locales, el joven keniano fue acusado de seis cargos por elaboración de un documento falso, emisión de un documento falso y robo de identidad. Tras haber sido interrogado en la Dirección de Investigación Criminal, el miércoles compareció ante un tribunal de Nairobi y quedó en prisión preventiva.

Cómo se descubrió al falso abogado de Kenia

Según explicó en un comunicado la Sociedad de Abogados de Kenia (LSK, por sus siglas en inglés) en un comunicado, Ntwiga -el abogado real- fue aceptado en el colegio en agosto de 2022 y se le abrió una cuenta en la plataforma.

Al parecer su suplantador, Mwenda, habría solicitado un certificado de práctica profesional en el portal para poder desempeñarse en los tribunales de Kenia. La asociación se puso en contacto con Nwiga, quien aseguró que no había pedido ese documento, pues en ese momento estaba trabajando en la Oficina del Fiscal General y no lo necesitaba.

En septiembre pasado, cuando quiso iniciar sesión en la plataforma, se dio cuenta que ya no podía.

Ahí el abogado reportó la situación al equipo de soporte de la LSK, el que a su vez descubrió que todos sus datos habían sido modificados, incluido el correo electrónico asociado, la foto de perfil y el lugar de trabajo.

Las evidencias indicaron que había sido Mwenda quien había tomado el control de la sesión del abogado real, pues modificó los datos y pagó por el certificado de práctica profesional.

Eric Theuri, presidente de la LSK, relató en una entrevista que Mwenda estuvo trabajando en una firma de abogados por un tiempo y luego fue despedido.

Foto referencial.

Desde la LSK condenaron la suplantación de identidad que habría cometido Mwenda e indicaron que están dispuestos a realizar nuevas medidas para reforzar la seguridad de su portal. Según Theuri, hay evidencias suficientes para que sea condenado por la justicia.

Sin embargo, tiene algunas figuras públicas que lo están apoyando. Francis Atwoli, secretario general de la Organización Central de Sindicatos de Kenia (COTU, por sus siglas en inglés) ha dicho que el joven es una “mente brillante” y que su caso “plantea cuestiones críticas sobre la accesibilidad y la inclusión de las profesiones”.

“Si, de hecho, es cierto que Brian ha estado ejerciendo la abogacía y representando exitosamente a clientes en asuntos legales, recomendamos firmemente un examen justo y transparente para evaluar sus conocimientos, habilidades y competencias en el campo del derecho”, reza el comunicado de Atwoli.

Mientras que Mike Sonko, polémico exgobernador de la ciudad de Nairobi, subió un video en el que aparentemente aparece junto a Mwenda. “Es inocente hasta que se demuestre lo contrario”, apuntó Sonko, quien ha sido relacionado con tráfico de drogas y lavado de dinero.

“Cuando llegue el momento podré aclarar este malentendido”, mencionó el acusado en el mismo registro.

Desde el Ministerio Público de Kenia han dicho que están investigando otros casos de personas que se han estado haciendo pasar por abogados en el último tiempo.