Cuando se habla de infusiones, es probable que se venga a tu cabeza a la típica abuelita que tiene una hierba predilecta para curar todos los males. Y en realidad, no está del todo equivocada, pues hay distintas plantas cuyas hojas o flores se utilizan actualmente como alternativa o complemento para tratar un sinfín de condiciones.
Sin embargo, existe una hierba entre todas que tiene muchos beneficios y que —según distintos estudios publicados en la revista Science Direct— sus compuestos entregan “un tratamiento natural, seguro y eficaz para muchas enfermedades y sus síntomas”.
Beneficios de la salvia para el cuerpo y la salud
La salvia es una hierba, cuyo nombre viene de la palabra latina salvare, que significa curar. Le hace honor a su nombre, pues es ampliamente utilizada como medicina para tratar distintos síntomas y enfermedades de forma segura.
Según una serie de investigaciones, tiene actividades antibacterianas, antioxidantes, antiinflamatorias, eliminadoras de radicales libres y antitumorales muy efectivas, por lo que tiene potencial para tratar desde una hinchazón o pesadez hasta la diabetes, Alzheimer y cáncer.
Desde la página del Ministerio de Salud de Chile (Minsal), exponen que la salvia se puede utilizar para las siguientes condiciones:
- En infusiones: afecciones estomacales, renales y nerviosas; alteraciones del ciclo menstrual; en la menopausia y contracciones uterinas; sudoración excesiva (hiperhidrosis).
- Uso externo: estomatitis, gingivitis, lavados y gargarismos.
Además, informaron lo siguiente sobre sus propiedades:
- Calma los retortijones estomacales.
- Mata las bacterias o impide su crecimiento.
- Disminuye la sudoración.
- Promueve y aumenta la producción de orina.
- Estimula o favorece el flujo menstrual.
- Modera la actividad del sistema nervioso.
- Disminuye las contracciones uterinas.
La salvia puede ser una gran aliada a la hora de combatir síntomas molestos. No obstante, no se debe utilizar por períodos prolongados y, en caso de embarazo o lactancia, lo mejor será preguntarle al médico de cabecera si se puede consumir.
Además, no reemplaza el tratamiento indicado por un médico y podría tener interacciones con ciertos medicamentos.