A finales de septiembre, un joven llamado Riley Walz subió una escalera y puso una caja de plástico en la parte superior de un poste de luz situado en District Mission, un barrio de San Francisco, Estados Unidos.

La caja es como cualquier otra, pero en realidad oculta un secreto. Y es que en su interior tiene un celular programado para capturar fragmentos de canciones que están escuchando los transeúntes que pasan por la zona.

El proyecto, denominado Bop Spotter, no solo “se trata de captar vibraciones”. En su sitio web, personas de todo el mundo pueden escuchar la lista de reproducción de los sonidos que el dispositivo ha registrado. La mayoría de las melodías están mezcladas con conversaciones, gritos y bocinas de autos, creando una combinación única y a la vez caótica.

Walz, su creador, es un ingeniero de software de 22 años que ha estado involucrado en otros experimentos curiosos, entre ellos, crear junto a sus amigos un restaurante de carnes falso que se hizo real por una noche y generar una aplicación de rutas aleatorias para corredores y ciclistas.

“Bop Spotter es como una cápsula del tiempo viviente que muestra en tiempo real qué canciones se están reproduciendo”, ha asegurado el joven a la prensa estadounidense.

Cómo funciona Bop Spotter

Bob Spotter puede definirse como un recopilador de la música que están escuchando las personas que transitan por Mission District, barrio que ha sido históricamente habitado por latinos.

Dentro de la caja plástica se encuentra un “teléfono Android de mala calidad”, que está configurado para que la aplicación de identificación canciones, Shazam, funcione sin interrupción, “las 24 horas del día, los 7 días de la semana”, detalla su sitio web. El micrófono del celular apunta hacia abajo para identificar fácilmente los sonidos de la calle, y luego, las registra en el sitio de Bop Spotter.

El sistema se mantiene encendido todo el tiempo gracias a la energía solar y puede funcionar en tiempo real por el Wi-Fi público y gratuito que hay en el barrio.

Walz ha mencionado que gastó aproximadamente unos 100 dólares en el proyecto y que gran parte del trabajo lo realizó durante los fines de semana.

Bop Spotter tiene una lista de reproducción de las canciones que ha captado.

Encontrar el poste ideal fue la parte más compleja de la misión secreta. Para ello, dijo el creador de Bop Spotter a The Washington Post, recorrió las calles de Mission District por varias horas hasta encontrar un sitio caótico, donde también hubiera Wi-Fi gratis y llegara abundante luz solar.

Una vez que encontró el sitio adecuado, subió las escaleras que le prestó un amigo y dejó la caja en la parte superior del poste. El sistema quedó programado para grabar 10 minutos de la música y que eso quede dividido en porciones de 15 segundos, que son los que entran de forma automática en Shazam.

Después de eso la aplicación hace lo suyo: escanea la música captada en la calle y la reconoce con su nombre. Cada una de esas canciones son añadidas a la lista de reproducción del sitio web de Bop Spotter, pese a que algunas de ellas sean más complicadas de reconocer por el ruido callejero.

Por qué se creó Bop Spotter

Según ha explicado el creador de Bop Spotter, uno de los motivos que lo llevó a diseñar este sistema se debe a que es un usuario frecuente de Shazam desde hace años.

“Busco canciones en Shazam todo el tiempo: en fiestas, en la calle, en restaurantes y tiendas. Cuando escucho una canción en persona y la escucho más tarde, me recuerda lo que estaba sintiendo en ese momento”, dijo a The Washington Post.

Luego comenzó a pensar que sería una buena idea tener un Shazam las 24 horas del día, los 7 días de la semana, pero en un lugar fijo, con el propósito de ver cómo las tendencias musicales podían ir cambiando.

Riley Walz es un usuario frecuente de la aplicación Shazam y ese fue uno de los motivos que lo llevó a crear Bop Spotter. Foto referencial.

Cuál es la inspiración de Bop Spotter

En los últimos años, varias ciudades de Estados Unidos como Chicago y San Francisco han recurrido a ShotSpotter. Se trata de un sistema con micrófonos que identifica si un sonido corresponde a un disparo de arma de fuego, de dónde proviene y cuándo ocurrió, por lo que ha sido utilizada para apoyar el trabajo de los policías.

Walz ha mencionado que fue ese sistema lo que inspiró a Bop Spotter: “Esto es eso, pero para la música”. Incluso, de ahí proviene su nombre.

“Esto es vigilancia cultural. Nadie se da cuenta, nadie consiente. Pero no se trata de atrapar criminales. Se trata de captar vibraciones. Una alimentación constante de lo que sucede en tiempo real”, describe Walz.

Qué tipo de música ha identificado Bop Spotter

El ingeniero de software pensaba que su dispositivo solo registraría unas 15 canciones a diario, pero esa cifra ha sido superada con creces: captura unas 150 pistas al día.

En total, desde que Bop Spotter fue instalado a fines de septiembre, se han detectado más de 1.500 canciones.

Bob Spotter está ubicado en un poste de Mission District, un barrio de San Francisco.

La lista de reproducción es variada, pero tiene una evidente predominancia de música en español, especialmente reggaetón. Solo algunas de canciones que se han capturado en los últimos días son Es un secreto de Plan B, Amor Prohibido de Selena, Reloj de Rauw Alejandro y Bring me to life de Evanescence.

Desde el sitio de Bop Spotter permiten que los usuarios escuchen el fragmento que se capturó en la calle, aunque también está la opción de reproducir la versión original en plataformas como Spotify y Apple Music.

El proyecto ha dejado tan entusiasmado a Walz que, el pasado 3 de octubre publicó en su cuenta de X (antes Twitter) que estaba buscando financiamiento para replicarlo en otras 10 ciudades del mundo, como Seattle, Nueva York, Londres y Berlín. En apenas una hora consiguió el dinero. “Sería genial tener una red de estos en funcionamiento”, comentó a la prensa.