No es un secreto que el consumo de alcohol es perjudicial para la salud. No obstante, podrían haber personas más vulnerables al deterioro: un nuevo estudio reveló que existen tres condiciones de salud que podrían empeorar el daño al hígado.
En conversación con CNN, el doctor Andrew Freeman, director de prevención cardiovascular y bienestar en el National Jewish Health, explicó la investigación y aseguró que existe un consumo problemático en gran parte de la población estadounidense no solo de alcohol, sino de alimentos ultraprocesados.
Y es el conjunto de todo ello lo que lleva a que decenas de miles de personas vivan con problemas de salud que, finalmente, pueden empeorar los riesgos de sufrir enfermedades como daños hepáticos graves, presión arterial alta o diabetes al consumir bebidas alcohólicas.
Estas son las tres condiciones de salud que podrían poner en excesivo riesgo a tu hígado, según la investigación.
Los 3 problemas de salud que empeoran el daño al hígado al consumir alcohol
Según el estudio publicado en Clinical Gastroenterology and Hepatology, las siguientes condiciones de salud pueden duplicar el riesgo de sufrir daños hepáticos graves tras el consumo de alcohol:
- Un estómago grande.
- Diabetes.
- Presión arterial.
“Sabemos que el alcohol es tóxico para el hígado y todos los grandes bebedores corren el riesgo de sufrir una enfermedad hepática avanzada”, aseguró el autor principal del estudio, el Dr. Brian Lee de la Universidad del Sur de California.
Además, añadió que “el hecho de que una persona no tenga una gran barriga, presión arterial alta o diabetes no significa que sea seguro consumir alcohol en exceso”.
El Dr. Freeman (quien no participó en el estudio) dijo que, en general, muchas personas no cuidan su salud y no miden el consumo de ultraprocesados, como hot dogs, salchichas, tocino, pepperoni o jamón, está muy normalizado en la cultura estadounidense.
Pero, ¿qué tiene que ver lo anterior con el alcohol?
“Cuando se ingieren alimentos altamente procesados, ricos en grasas y azúcares, la insulina se dispara, lo que genera resistencia a la insulina, exceso de azúcar en sangre y, por último, hígado graso. Y si además se bebe, el riesgo se amplifica”.
Así también pasa con la obesidad y la presión arterial alta: todos estos problemas hacen que se acumule grasa en el hígado, y el consumo de alcohol, que es altamente tóxico para este órgano, empeora el panorama.
Qué le hace el alcohol a nuestro hígado según los médicos
Según explicó el médico, el consumo de alcohol daña las células del hígado al tratar de metabolizarlo.
Y es en este proceso donde, al tener un hígado graso, la acumulación de grasa empeora, poniendo en riesgo así a este órgano a estar constantemente inflamado y a tener cicatrización.
Todo esto puede culminar en una cirrosis, que aumenta el riesgo de tener una insuficiencia hepática y cáncer de hígado.
Según el Dr. Brian Lee, los hígados de los bebedores moderados a fuertes tenían un aumento significativo de cicatrices en este órgano.
“Los resultados identifican un segmento de la población con riesgo muy alto de sufrir enfermedades hepáticas y sugieren que los problemas de salud preexistentes pueden tener un gran impacto en cómo el alcohol afecta al hígado”, dijo en un comunicado.