Estos hábitos ayudan a que el cerebro luzca más joven a los 70 años, según estudio

El cerebro es un órgano complejo que cumple funciones esenciales en el organismo, como la coordinación y control de la conducta, el pensamiento y las emociones.

Preocuparse sobre cómo mantenerlo saludable es una medida clave a medida que se produce el envejecimiento. Y es que la edad, especialmente a partir de los 65 años, es un factor de riesgo para la demencia, que es un síndrome que provoca deterioro cognitivo.

Ahora, un nuevo estudio liderado por investigadores del Instituto Karolinska y la Universidad de Gotemburgo, en Suecia, apunta a los factores que influyen en el envejecimiento cerebral. Los resultados fueron publicados en diciembre en la revista Alzheimer’s & Dementia: The Journal of the Alzheimer’s Association.

El equipo de investigadores de Suecia descubrió en su estudio que los cerebros de apariencia más joven se relacionaron a un estilo de vida saludable, que suele incluir hábitos como la actividad física regular, dieta equilibrada, no fumar y no beber.

Mientras tanto, los cerebros de aspecto más viejo se asociaron con la inactividad física, la diabetes, los accidentes cerebrovasculares, la inflamación y los niveles altos de glucosa en la sangre.

“Una de las conclusiones del estudio es que los factores que afectan negativamente a los vasos sanguíneos también pueden estar relacionados con cerebros de aspecto envejecido”, dijo en un comunicado Anna Marseglia, investigadora del Instituto Karolinska y autora del estudio.

De acuerdo a la experta, lo anterior “demuestra lo importante que es mantener los vasos sanguíneos sanos para proteger el cerebro, asegurándose, por ejemplo, de que el nivel de glucosa en sangre se mantenga estable”.

El estudio contó con la participación de 739 individuos mayores de 70 años que no tenían deterioro cognitivo. De ese grupo, 389 eran mujeres.

Los investigadores tomaron realizaron resonancias magnéticas de los cerebros de los participantes, y después, calcularon la edad de las imágenes cerebrales usando un algoritmo basado en Inteligencia Artificial (IA).

“El algoritmo es preciso y robusto, pero fácil de usar”, señaló Eric Westman, autor principal del estudio y profesor de neurogeriatría del Instituto Karolinska.

“Es una herramienta de investigación que todavía necesita más evaluación, pero nuestro objetivo es que también se pueda utilizar clínicamente en el futuro, por ejemplo en investigaciones sobre la demencia”, agregó el investigador.

Las imágenes cerebrales que obtuvo el equipo fueron complementadas con muestras de sangre de los participantes, que les permitiría medir los lípidos, glucosa e inflamación. Adicionalmente, se sometieron a pruebas cognitivas.

Mediante la herramienta de IA, los investigadores lograron calcular que la edad cerebral para los dos sexos era de 71 años en promedio. Después estudiaron la “brecha de edad cerebral”, restando la edad biológica de la edad cronológica.

El análisis también arrojó que mujeres y hombres presentan variaciones en los factores vinculados al envejecimiento cerebral. Esto puede ser un indicador de que ambos grupos difieren en el desarrollo de su resiliencia, es decir, la capacidad del cerebro para adaptarse y recuperarse, que es algo que los investigadores planean estudiar a futuro.

“El año que viene lanzaremos un estudio para comprender cómo la salud social (incluido el compromiso social, la conexión y el apoyo) en la mediana y la vejez, junto con el sueño y el estrés, influyen en la resiliencia del cerebro, con un enfoque en los factores de salud de las mujeres”, añadió Marseglia.