Si bien el envejecimiento es un proceso que es parte de la vida, y no se puede detener o eludir, diversos estudios científicos han identificado a lo largo de la historia que hay algunas prácticas que son primordiales para promover la longevidad de las personas.
En esa línea, una investigación plantea que ocho hábitos saludables pueden ser capaces de prolongar la vida por dos décadas más, en el caso de que se cumplan todos los puntos. El estudio acaba de ser presentado esta semana en Nutrition 2023, la reunión anual de la Sociedad Estadounidense de Nutrición.
Qué encontró el estudio
Para llegar a sus hallazgos, el equipo liderado por Xuan-Mai Nguyen, especialista en Ciencias de la Salud del Million Veteran Program, se dedicó a analizar los datos del estilo de vida de más de 700.000 veteranos militares estadounidenses, quienes tenían entre 40 y 99 años. Además, se hizo un monitoreo a las 33.375 muertes que se produjeron durante el estudio.
Los análisis posteriores permitieron concluir que mientras antes se practiquen los hábitos, más se podrá impulsar la longevidad. Por ejemplo, se identificó que si los hombres de 40 años adoptan solo una de las costumbres saludables, estarán brindando 4,5 años más a su vida. En el caso de que se apliquen dos medidas, su vida aumentará 8,6 años. Y de realizar las 8, será posible prolongar la vida en 24 años más.
Las mujeres también presentaron una extensión en la cantidad de tiempo que viven, pero con ciertas diferencias frente a los hombres. Se descubrió que aplicar un hábito permite agregar 3,5 años de vida en el caso de las mujeres, y al efectuar dos, estarán añadiendo 8 años de vida. En última instancia, al cumplir las 8 acciones identificadas la vida se alargó en 22 años.
“Nos sorprendió mucho todo lo que se podría ganar con la adopción de uno, dos, tres o hasta los ocho factores de estilo de vida”, comentó Nguyen sobre los hallazgos del artículo.
“Los resultados de nuestra investigación sugieren que adoptar un estilo de vida saludable es importante no solo para la salud pública, sino también para el bienestar personal. Y cuanto antes, mejor. Pero incluso si se hacen pequeños cambios a los 40, 50 o 60 años se siguen viendo beneficios”, añadió la experta.
Cuáles son los 8 hábitos que podrían sumar años de vida
El estudio liderado por Nguyen determinó que las prácticas que podrían incrementar la cantidad de vida de las personas, hasta en más de 20 años, están al alcance de cualquiera.
El primer hábito saludable es el ejercicio. Durante años, los científicos han dejado en evidencia cuán asociado está la actividad física con tener una vida longeva y de buena calidad. No se trata de llevar a cabo prácticas deportivas de mucho esfuerzo, ya que incluso las ligeras o moderadas podrían hacer una diferencia.
Según rescata CNN, Nguyen plantea que la incorporación de esa acción consigue disminuir el riesgo de muerte hasta en un 46%, si se compara con las personas que no realizan ningún tipo de actividad física.
No consumir opioides es otra medida saludable que puede prolongar la vida. La investigación expone que evitar a toda cosa estos analgésicos conlleva a reducir hasta en un 38% los peligros de muerte prematura. Cabe recordar que desde hace un tiempo Estados Unidos está enfrentando una compleja crisis por el uso indebido de los opioides, lo que solo se ha ido agudizando con el paso de los años.
En tercer lugar está no fumar. Según el estudio, no haber sido consumidor de tabaco en ningún momento de la vida permite disminuir hasta en un 29% la mortalidad. Aún así, otros estudios científicos han reflejado que abandonar el tabaquismo -en cualquier momento- también puede causar impactos positivos en la salud.
Controlar el estrés es otro hábito saludable a considerar, según el artículo, pues permitiría reducir en un 22% los peligros de muerte.
Tener una alimentación saludable, basada en plantas, también tiene beneficios: la medida incrementa hasta en un 21% la esperanza de vida. Nguyen advierte que no se trata necesariamente de convertirse en vegetariano, sino que lo ideal es aumentar la presencia de verduras y cereales integrales en la dieta.
No consumir alcohol en exceso fue otro de los comportamientos saludables que identificó el estudio, ya que esto reduce hace en un 19% la mortalidad. De acuerdo a los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC), beber en exceso incluye a “los atracones de alcohol, beber demasiado y cualquier consumo de alcohol por parte de mujeres embarazadas o personas menores de 21 años”. Un atracón de alcohol, por ejemplo, significa tomar más de 4 tragos en una sola ocasión.
Adicionalmente, Nguyen y su equipo consideraron que otro hábito necesario es dormir bien: disminuye el riesgo de muerte en un 18%. Si bien para lograr un buen dormir la cantidad de horas puede variar según cada realidad, los expertos han identificado que el tiempo sugerida es de 7 a 9 horas.
Según los Institutos Nacionales de Salud (NIH) de Estados Unidos, la falta de sueño se ha asociado a enfermedades al corazón, el incremento de los riesgos de padecer obesidad e infecciones.
En último lugar, el estudio determinó que tener relaciones sociales positivas también impulsa la longevidad en un 5%.
Un punto importante para Nguyen es que también observaron si estos resultados se alteraban al no considerar personas que padecían enfermedades como diabetes, colesterol alto o cáncer. Finalmente, llegaron a la conclusión que aún con esos padecimientos los hábitos causaban beneficios para la salud.
Además, hay considerar que el estudio se centró en veteranos estadounidenses, además de exponer una asociación y no causa-efecto entre los factores. Pese a lo anterior, los resultados reflejan cuánto pueden llegar a influir los comportamientos saludables en vivir más tiempo.