El hallazgo de decenas de huellas de dinosaurios con una antigüedad de 170 millones de años en la isla escocesa de Skye, podría arrojar luz sobre la evolución de estas especies durante el periodo del Jurásico medio, señala un estudio divulgado hoy.
Las huellas, que se descubrieron en una laguna poco profunda de esta isla situada en la costa noreste de Escocia, pertenecieron a ejemplares de saurópodos y terópodos que vivieron durante el Jurásico medio.
Ambos ejemplares podían alcanzar los dos metros de altura y mientras los terópodos eran bípedos, carnívoros y estaban emparentados con el Tyrannosaurus Rex, los saurópodos eran cuadrúpedos, herbívoros y se caracterizaban por tener un cuello largo de diez o más vértebras cervicales.
El descubrimiento, publicado por la revista Scottish Journal of Geology y liderado por expertos de la Universidad de Edimburgo, ha sido descrito como "globalmente importante", ya que puede ampliar el conocimiento sobre el período histórico del Jurásico Medio, del cual se han encontrado pocas evidencias fósiles en todo el mundo.
Los investigadores midieron, fotografiaron y analizaron cerca de 50 huellas, que presentaban dificultades debido a las condiciones de las mareas, el impacto de la erosión y los cambios en el paisaje.
Este es el segundo hallazgo de huellas de dinosaurios hecho en Skye tras el realizado en 2015.
Paige de Polo, el experto de la Universidad de Edimburgo que dirigió la investigación, destacó que el hallazgo de las huellas se hizo "en rocas ligeramente más antiguas que las encontradas anteriormente en Duntulm", también en esta isla escocesa, y recalcó su importancia para aumentar el conocimiento sobre esta especie.
"El hallazgo demuestra la presencia de saurópodos en esta parte del mundo a través de una escala de tiempo más larga de lo que se conocía anteriormente", afirmó.