Tom Grond es un neerlandés que se ha dedicado a recorrer el mundo, viaje en el que lleva más de 3.333 días de viaje, casi nueve años, con el objetivo de no quedarse más de 2 a 3 semanas en el mismo lugar.
En su recorrido por Sudamérica, el bloguero se detuvo en Santiago para visitar uno de los lugares más emblemáticos de la capital y ubicado en su casco histórico: la Plaza de Armas.
El europeo explicó se trata de la plaza principal de cada ciudad sudamericana, quedando rápidamente impresionado por la arquitectura del lugar.
“Hay un contraste muy genial, creo que aquí hay una catedral y un edificio súper moderno al lado y la oficina de correo, es hermoso”, indicó el viajero.
Sin embargo, rápidamente su tono cambió, al advertir lo desmejorado que está la plaza, sobre todo en lo que se refiere a contaminación y el comercio sexual.
“Hay prostitución… un montón de personajes raros, contaminación. Lo siento, Santiago (...); Miro alrededor y veo niñas súper jóvenes preguntándome cosas raras… es triste. Hay un montón de inmigrantes aquí, lo que también es triste”, sentenció Tom Grond.
Rodrigo Guendelman, de Santiago Adicto, conversó con La Tercera y respaldó la visión del neerlandés, “ha habido un notable aumento de la prostitución en la Plaza de Armas y también en los alrededores, especialmente en la calle puente”.
“En todas las calles cercanas se ve un gran aumento del comercio ambulante, de gente que vende comida en la calle sin ninguna seguridad higiénica”, agrega el periodista.
Finalmente, Guendelman detalla que “si bien la plaza de armas sigue siendo un lugar muy importante, es un hecho que hay ciertos aspectos que pueden sorprender a un turista que vino años atrás”.