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La presencia de hipopótamos es una de las características que por mucho tiempo ha rodeado a la Hacienda Nápoles, una de las residencias donde vivió Pablo Escobar y que en la actualidad es un parque temático. Ahora, uno de estos mamíferos protagonizó un complicado incidente que le causó la muerte.
El hecho ocurrió la noche de este martes en las cercanías de la Hacienda Nápoles, específicamente en la jurisdicción del municipio de Puerto Triunfo, al oriente de Antioquia. Según reportaron medios locales, el hipopótamo habría chocado violentamente contra una camioneta Renault Duster, tras lo cual perdió la vida de forma inmediata y quedó varado en medio de la carretera.
La parte delantera del auto quedó prácticamente destruida por el impacto. Sus ocupantes recibieron ayuda asistencial, pero según comentaron las autoridades, quedaron con heridas leves y no tuvieron que ser hospitalizados en recintos de salud.
Al parecer el animal escapó de los lugares donde suele estar con los otros ejemplares, y por lo mismo se encontraba en la autopista que une Medellín con Bogotá, donde sucedió el accidente de tránsito.
La problemática presencia de los hipopótamos de Pablo Escobar
Como otro de sus deseos un tanto excéntricos, en los años ‘80 Pablo Escobar tomó la determinación de adquirir cuatro hipopótamos para tenerlos dentro de la Hacienda Nápoles. En aquella época su zoológico personal ya contaba con otros animales como elefantes y jirafas.
Pero cuando el dirigente del Cartel de Medellín murió en 1993 y las autoridades colombianas tomaron el control de la propiedad, los mamíferos comenzaron a deambular prácticamente sin control en espacios urbanos.
Fue en ese abandono que los animales hallaron un espacio de acogida en el valle del Magdalena Medio, cerca de un río, donde retomaron la vida que solían tener antes de ser comprados.
Sin embargo, su libertad en esa zona también produjo que se multiplicaran a niveles inesperados: de los cuatro ejemplares iniciales de la especie, se estima que en la actualidad hay entre 130 y 150.
En los últimos años ese crecimiento explosivo significó un problema ecológico en Colombia, ya que los animales tienen un comportamiento agresivo y territorial frente a especies nativas, así como también con los humanos.
En esa línea, en marzo de 2022 el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de Colombia incorporó a los hipopótamos en la nómina de “especies exóticas invasoras” en ese país.
Eso permitió dar un paso para “la prohibición de la comercialización, movilización, fomento, tenencia, reproducción, propagación, con cualquier propósito, de la especie Hipopotamus amphibius”, advirtió la institución.
Asimismo, hace unas semanas salió a la luz una iniciativa de las autoridades de Antioquia que busca reubicar a 70 de estos mamíferos, lo que implica un desembolso económico de aproximadamente US$ 3,5 millones.
El plan radica en que unos 10 hipopótamos sean enviados al Santuario de Ostok en México, mientras que otros 60 tendrán un nuevo hogar en el Centro de Rehabilitación y Rescate Zoológico Greens en India.
