Temor a que un asteroide choque contra la Tierra. Esta es la razón por la que un equipo de científicos chinos hizo un llamado a que el planeta se prepare, y es que todo apunta a que el riesgo de esta catástrofe cósmica es mayor de lo que se pensaba anteriormente.
Según explicó el equipo chino, liderado por He Zhang, del Instituto de Sistemas de Naves Espaciales de Pekín, la información que se maneja en la actualidad sobre asteroides cercanos a la Tierra —y que son potencialmente peligrosos— es solo una fracción de la verdadera cifra que podría amenazar la vida en el planeta.
“Puede haber una brecha significativa entre el número de asteroides cercanos a la Tierra que se han descubierto y el número real que existe”, se lee el estudio, publicado en el diario académico Scientia Sinica Technologica.
Es por esto que la mejor opción sería “minimizar la posibilidad” de que un asteroide llegue a chocar contra la Tierra, a través de “medidas extremas”.
Qué tan probable es que un asteroide choque contra la Tierra
El estudio del equipo chino estuvo enfocado en ver cuáles son las alternativas viables que tiene la humanidad ahora, considerando el avance de la tecnología, para lograr proteger al planeta de asteroides de distintas formas, tamaños y densidades.
Y el resultado arrojó que solo las armas nucleares podrían evitar que un asteroide destructor choque contra la Tierra. Y es que se requiere de mucha fuerza para lograr desviar uno de estos elementos —como cohetes armados con cabezas nucleares—, pues los asteroides pueden ser demasiado graves y riesgosos.
“Una explosión nuclear tiene un rendimiento sorprendente para la autodefensa”, aseguraron los autores del estudio.
Aunque la medida propuesta por China es extrema, la NASA también ha propuesto una alternativa para proteger a la Tierra de una posible colisión de un asteroide.
Es más, la agencia espacial suele ejecutar ejercicios de impacto a asteroides cada dos años. Actualmente, tienen la misión DART (Double Asteroid Redirect Test), que busca entender si la humanidad puede influenciar la trayectoria de un asteroide potencialmente peligroso.
En uno de ellos, la NASA pudo impactar con éxito la luna del asteroide Dimorphos, para alterar su órbita. No obstante, este método tendría limitaciones y no podría servir contra un asteroide de mayor tamaño y peligrosidad.
Incluso, DART podría tener efectos secundarios negativos contra la vida en la Tierra: un estudio aseguró que al disparar contra un asteroide, éste se puede romper en millones de fragmentos de roca espacial y caer sobre la Tierra y Marte, provocando así una lluvia de “estrellas fugaces”, causada por el ser humano por primera vez.
Con estos antecedentes, los científicos chinos aseguraron que es necesario desarrollar una tecnología que pueda defender con efectividad al planeta de asteroides gigantes, y también evitar los daños colaterales al planeta.
Por ejemplo, en el artículo se lee que sería necesario poder contar con ojivas nucleares que se lancen desde la Tierra hacia un asteroide en un tiempo “extremadamente reducido” para atender rápido la emergencia y también lograr que esto funcione en base a un sistema de precisión.
El margen de error debe ser mínimo, algo que es extremadamente difícil de lograr, y es que actualmente, ningún país tiene la capacidad de lanzar ojivas nucleares al espacio con poca antelación.
En esta línea, según explicaron los autores, el mundo debe enfocarse en construir cohetes nuevos que respondan a todas las anteriores necesidades: que puedan tener una respuesta rápida, que sean precisos, que puedan lanzar ojivas nucleares con facilidad y que estén desplegados en puntos estratégicos del espacio.
Y es que los cohetes actuales no están creados ni habilitados para ello, por lo que no servirían en caso de tener una emergencia cósmica.
De esta manera, ante una amenaza inminente de un asteroide que va a colisionar con la tierra, el planeta podría estar preparado para intentar defenderse y salvar a la humanidad de una catástrofe.
Pero también hay un problema con ello: según el Tratado del Espacio Exterior de 1967 y el Tratado de Prohibición Completa de los Ensayos Nucleares, está prohibido el uso y despliegue de armas nucleares en el espacio.
Es por esto que, en caso de no poder contar con la creación y autorización de luchar contra los asteroides con armas nucleares, los científicos chinos también propusieron otras alternativas —que podrían no ser tan efectivas—, pero que vale la pena tenerlas en caso de emergencia.
Estas serían el impacto cinético y las armas láser de alta potencia.
El mayor contra de ellas es que son más difíciles de utilizar cuando se tiene tiempo limitado, como en una emergencia inminente, no obstante, en combinación con otras tecnologías, podrían ser eficaces para defender al planeta de los asteroides potencialmente peligrosos.
De esta manera, los ejercicios de la NASA y otras agencias espaciales y organismos internacionales cobran relevancia y entran al juego: y es que su visión —más que atacar de raíz a los asteroides con armas nucleares poderosas— es de prepararse, identificar los asteroides peligrosos y planificar qué hacer con ellos y cómo defender al planeta a largo plazo.
“Estos escenarios hipotéticos son complejos y requieren un esfuerzo significativo para diseñarlos, con el fin de que sean útiles y desafiantes para los participantes del ejercicio y los responsables de la toma de decisiones”, aseguró el director del Centro de Estudios de Objetos Cercanos a la Tierra (CNEOS) de la NASA, Paul Chodas.