Sorpresa causó la revelación de Natalia Améstica, la venezolana y exmánager del rapero Canserbero, quien después de ocho años confesó haber asesinado al artista y a su esposo, Carlos Molner.
Durante todo ese tiempo de silencio, las autoridades pensaban que el rapero había asesinado a Molner —quien era su productor— y que después se había suicidado. No obstante, en diciembre de 2023, la mujer confesó que fue ella quien los drogó y aprovechó su estado para asesinarlos a puñaladas.
Su hermano, Guillermo Améstica, la habría ayudado a “arreglar la escena” y, junto con funcionarios corruptos a los que le pagó para colaborar, armaron la hipótesis que las autoridades creían hasta hae poco: Canserbero se habría suicidado al no soportar la culpa de haber asesinado a su productor.
Pero en el escalofriante relato, Natalia Améstica menciona a Chile como el origen del problema que la habría llevado a cometer el doble homicidio. Estos son los detalles.
Qué tiene que ver Chile en el asesinato de Canserbero
La historia de Guillermo y Natalia Améstica Moraga, los dos hermanos imputados en Venezuela por el homicidio calificado de Tyrone González (más conocido como Canserbero) y Carlos Molnar, se remonta a muchos años atrás.
Según recopiló El País, Guillermo Améstica y Alicia Moraga, los padres de los imputados, vivían en la comuna de Cerro Navia, en Santiago. Bárbara, la primera hija de ambos, reveló al diario español que su padre era pintor y hacía carteles publicitarios con brocha.
Además, su abuelo Víctor Manuel Moraga era obrero de construcción y simpatizante del Partido Comunista. Durante la dictadura militar, “nos allanaron tres veces la casa y él estuvo detenido en el Estadio Nacional”.
Por ello, el 6 de abril de 1974, tras el golpe de Estado, decidieron volver a Venezuela, al igual que muchas familias que se habían asentado en Chile durante la época.
Y pese a que continuaron su vida en el caribe, en Maracay, Estado de Aragua, la familia tenía doble nacionalidad: venezolana y chilena. Es por esto que su vínculo con Chile se mantuvo firme y todos solían volver esporádicamente al país y pasar una temporada, antes de regresar a Venezuela.
Fue en una de esas visitas donde se originaron los hechos que, según Natalia Améstica, la llevaron a cometer el delito. Ella y Carlos Molnar, quien también era músico, fueron compañeros de colegio, pero años después se reencontraron y comenzaron su relación.
Durante su paso por la industria musical conocieron a Canserbero, quien le pidió a Molnar que pudieran colaborar juntos. De esta forma, Natalia se habría convertido en una especie de mánager del rapero, aunque según Bárbara, su hermana, no era su mánager oficial, sino que ayudaba a Molnar a hacer algunas gestiones.
“El problema empezó en Chile (...) cuando en plena gira supe, después de haber hecho la organización y comprar los pasajes para irnos para allá, que no iba a recibir pago por parte de Carlos”, dijo Natalia en los videos donde confesó el homicidio.
La mujer expresó su descontento después de que su pareja, Carlos Molnar, le negara recibir un porcentaje de las ganancias de la gira, además de que Canserbero le habría expresado que no quería que fuera su mánager.
“Eso me dolió mucho. Y quedé con mucho sufrimiento interno por desprecio”.
Después que asesinó a los dos hombres y su hermano la ayudó a cubrir el crimen, Natalia señaló que “me fui a Chile, huyendo, aterrada, pensando que al final se iba a saber la verdad”.
Según el diario español, las hermanas de Natalia y Guillermo, Bárbara y Tamara, están en Chile solicitando a las autoridades que permitan a sus hermanos, como ciudadanos chilenos, tener un defensor privado en Venezuela, pues en su país enfrentarán el juicio con un abogado público.