En la asunción presidencial de Javier Milei en Argentina, uno de los elementos más distintos que causaron sorpresa fue que, rompiendo una tradición del país trasandino, decidió lucir un bastón presidencial personalizado, en donde se podían apreciar a sus cuatro perros tallados.
La historia de los perros, de la especie mastín (o mastiff), fueron parte importante de la campaña del ahora mandatario, en donde regularmente mencionaba a sus “hijitos de cuatro patas”, a quienes incluso agradeció al momento de jurar como presidente de Argentina.
Sus perros sin embargo no son como cualquier can: son en realidad clones, y Milei desembolsó unos 50 mil dólares para crearlos.
Los cinco perros -nombrados en honor a reconocidos economistas- son producto de la clonación de su primera mascota Conan, quien llevaba ese nombre por el personaje “Conan, el bárbaro”, según detalla el New York Times en su reportaje “The 5 Clones in Argentina’s Election”.
Para llevar a cabo este proceso, Milei en 2014 se contactó con la compañía PerPETuate, e indicó que estaba interesado en clonar a Conan.
“Dijo que su perro era su vida”, señaló el dueño de la empresa, Ron Gillespie, al NYT.
Con un costo de 1.200 dólares, Milei envío muestras del tejido de Conan a socios de la compañía, científicos del Instituto Politécnico Worcester (en Massachusetts), quienes cultivaron células llenas del ADN del perro y luego las congelaron criogénicamente.
Cuatro años después, y tras la muerte de Conan, Milei se contactó nuevamente con la compañía, y pagó alrededor de 50 mil dólares por el procedimiento en donde le aseguraban al menos un clon de su mascota.
Según detalló Gillespie al medio estadounidense, la clonación de un perro normalmente requiere más de 100 óvulos -el equivalente a un año de producción de óvulos de cinco a 10 perras- los que se extraen quirúrgicamente de donantes. Tras estimular los óvulos con electricidad, entre 10 y 15 de los embriones resultantes se implantan en el útero de una perra que pasará a ser la madre subrogada.
Para la clonación, Gillespie se puso en contacto con ViaGen Pets, la única empresa estadounidense que clona perros, y si bien en casi tres de cada cuatro casos la clonación de un perro produce un solo clon, con el perro de Milei se lograron cinco.
“Estaba eufórico”, señaló el experto.
Cuando los clones llegaron a Argentina, uno comenzó a responder al nombre de “Conan” y parecía disfrutar de los mismos programas de televisión que el Conan original, relató Gillespie. Debido a esto Milei nombró a ese perro Conan, y a los otro perros, les puso los nombres de economistas: Murray Rothbard, Milton Friedman y Robert Lucas.
En una entrevista con la revista CARAS en 2018, señaló que debido a sus mascotas su casa “era Kosovo”.
“Son unas bestias. Está todo destruido por ellos”, destacó en aquél entonces. “Lo bueno, a pesar de que son muchos, es que son una raza tranquila“.
La clonación de mascotas sin embargo, no está exenta de polémica, ya que algunos especialistas en bioética y también diversos grupos de defensa de los animales están en contra del proceso, cuestionando si es ético clonar a una mascota considerando que se requiere el uso de varios animales para la donación de óvulos y luego también para gestar los fetos clonados.
Tras el triunfo electoral de Milei, PerPETuatea le dedicó una publicación en su sitio web destacando que el ahora mandatario había dedicado su victoria a sus perros clonados por la empresa.