Tomi, un quiltro argentino, vivió mucho tiempo deambulando por las calles de Mendoza, hasta que la automotora Lipari lo rescató, contrató y hoy es jefe del equipo. Así como con él, Lipari bromea en sus redes sociales con distintos perritos rescatados que son los “vendedores” de sus automóviles y motocicletas.
Entre medio de una creciente inflación en Argentina y la dificultad de comercializar vehículos usados, la concesionaria viste a sus perritos con uniformes, corbatas, gorras, camisetas de la selección e incluso disfraces para poder promocionar sus productos.
Esta estrategia de marketing sin duda llamó la atención de miles de internautas, quienes viralizaron el Instagram de la automotora que ya cuenta con más de 3800 seguidores y continúa publicando imágenes e historias con su personal perruno.
“Muero por ir a comprar un auto y que me atienda Tomi”, escribió una usuaria en los comentarios.
“¿El perro también se vende?”, preguntó otra usuaria en una publicación de un perrito posando con un Ecosport 2012.
“¡Los amo! No duden que cuando compre un auto, será a ustedes”, les dijo otro usuario.
“Mostrar que además de buenos vehículos tienen un lado humano, los vuelve más respetables (...) Ojalá les ayude a vender mucho”, reflexionó un internauta. Y es que Lipari también se encarga de enviar mensajes para concientizar sobre la adopción de animales callejeros.
Un año difícil para los autos usados en Argentina
Según el diario argentino TN, en diciembre de 2022 se vendieron 22,95% menos autos que el mismo mes en 2021.
“Terminó un año para el olvido para el sector del auto usado”, comentó el presidente de la Cámara de Comercio Automotor del país.
“Los datos finales muestran que el auto usado ha quedado lejos de la posibilidad de la gente”, declaró, además de instar a los negocios a adaptarse y trabajar en conjunto para recomponer el sector.