En 2013 ingresó el proyecto que "Reconoce y da Protección al Derecho a la Identidad de Género", el que posteriormente fue conocido como Ley de Identidad de Género. Luego de varios años, hoy logró ser aprobado.
Un avance, califican los grupos de apoyo a la temática trans. Sin embargo, lamentan que se rechazará la inclusión de niños, niñas y adolescentes.
¿Qué implicancias tiene esa ausencia? Contribuye a perpetuar la discriminación y exclusión que sufre la infancia trans en Chile, indica la activista trans Constanza Valdés. "La ausencia del reconocimiento de su identidad en una etapa tan importante para su formación, provocará problemas de autoestima, de bullying, discriminación y todo lo que eso trae aparejado. Que se haya excluido a menores de 14 años, es no entender nada sobre la infancia trans y que este derecho tiene que ver con el reconocimiento de la identidad autopercibida".
Para Franco Fuica, vicepresidente de Asociación Organizando Trans Diversidades (OTD Chile), las consecuencias son evidentes, ya que al no estar los menores de 14 años en la ley, "los deja en el desamparo tanto simbólico como práctico, ya que no van a poder ser personas reconocidas tanto en su identidad como en su expresión de género"
Chile está a la vanguardia en temas de infancia trans, dice Fuica, "pero es muy lamentable que siendo una realidad tan palpable, tan visible, se haya dejado fuera a las personas menores de 14 años".
"Y las personas trans menores de 14 años existen, entonces que la ley no les garantice el acceso real a este derecho, es una falta de criterio, dado que los deja en la marginalidad, teniendo en consideración que Chile ha firmado todos los tratados, pero no está resguardando los derechos de los niños trans", señala Fuica.
En esa misma línea, ayer el Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh) denunció anta el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), la exclusión de niños y niñas trans de la Ley de Identidad de Género.
La exclusión de los menores de 14 años, detalla el Movilh, violenta la Convención de los Derechos del Niño y las exigencias de la Corte Interamericana de Derechos Humanos. "Además es contraria a los fallos de nuestros propios tribunales de justicia, en un contexto donde el 35% de las personas trans intentó suicidarse antes de los 15 años", destacan.
Piso mínimo
El proyecto de ley es un piso mínimo para el reconocimiento de la identidad de las personas trans, señala Valdés. Pero no ahonda en temas de derechos económicos, sociales y culturales de las personas trans, aclara. "Por ejemplo, nada se ha discutido sobre la seguridad social de personas trans que nunca han podido cotizar ni ejercer un trabajo formal a raíz de la constante discriminación y exclusión que sufren diariamente".
Otro de los puntos que quedan fuera, indican, se relaciona con el acceso al trabajo de las personas trans. En argentina, existe lo que se llama cupo laboral trans, dice Valdés, que consiste en un porcentaje de personas trans contratadas que deben cumplir las instituciones públicas. Esto se hace especialmente porque son objeto de numerosas discriminaciones y en la mayoría de las casos, aunque tengan las aptitudes, son discriminadas por ser trans.
"Pensemos el caso de todas las mujeres trans que actualmente ejercen el trabajo sexual como la única vía de subsistencia, que de acuerdo con estadísticas de Red Lac Trans 95% de las mujeres trans en Chile ejerce el comercio sexual. Esta ley les entregará a esas personas un derecho abstracto a la identidad de género y la materialización en su cédula pero no les garantizará acceso al trabajo. En este ámbito, esta ley servirá para todas las futuras generaciones pero como nos hacemos cargo de toda esa población trans que en la actualidad no puede ejercer sus derechos?", señala Valdés.