Halloween es la época preferida de miles de personas, pero para las autoridades de China, se ha transformado en un dolor de cabeza.
Especialmente en Shanghai, la ciudad más grande del gigante asiático, se han tomado estrictas medidas de seguridad por la festividad incluso antes del 31 de octubre. Esto, ya que en los últimos días los agentes policiales han estado patrullando el centro de la ciudad para restringir las celebraciones y detener a personas disfrazadas.
La vigilancia policial en China por Halloween
De acuerdo a medios como BBC y The New York Times, muchas personas que se disfrazaron antes de Halloween en la ciudad china terminaron siendo trasladadas a furgones policiales. Estaban vestidos como Buda, Donald Trump, Kim Kardashian o personajes de cómics como Batman y Deadpool.
Registros que aparecieron en redes sociales también han evidenciado el aumento de las medidas de seguridad en la ciudad, incluyendo vallas de control en las aceras para limitar el tráfico peatonal. El sábado pasado, agentes también acudieron a dispersar a los asistentes a un festival celebrado en el parque Zhongshan.
Las autoridades no realizaron un anuncio oficial que prohibiera hacer algún tipo de actividad por Halloween. Sin embargo, a inicios de octubre los dueños de locales comerciales como bares y cafeterías habrían recibido advertencias del gobierno de Shangai de que no organizaran eventos de esa temática, con el fin de mantener “el orden social y la imagen pública”, consigna Reuters.
Por qué China le teme a Halloween
El intenso control policial por Halloween en la ciudad china ocurre exactamente un año después de que miles de jóvenes usaran sus mejores prendas y salieran en masa a celebrar.
En esa ocasión se vieron los típicos disfraces como hadas, zombies y superhéroes, pero lo que más se viralizaron fueron los que aprovecharon la ocasión para criticar y burlarse del gobierno chino, los confinamientos por Covid-19 y el desempleo.
Se trataba también del primer Halloween que se celebraba desde que el país asiático había puesto fin a las restricciones por la pandemia, por lo que muchos usuarios en redes aseguraron que se trataba de una especie de terapia colectiva.
Desde el gobierno de Shangai también la celebración como algo positivo, pues en un comunicado aseguraron que “con su mezcla única de tradiciones occidentales y creatividad china, ofreció una visión del cambiante paisaje cultural de una ciudad vibrante”.
Pero este año, esa visión cambió. Ahora, las autoridades chinas han determinado reforzar el control en las calles de la ciudad con el fin de evitar que las escenas de Halloween de 2023 se vuelvan a repetir.
De acuerdo a The New York Times, la restricción al evento también ocurre en un momento en que las autoridades se han vuelto mucho más restrictivas de la expresión personal y no ven con buenos ojos a las grandes multitudes que se reúnen espontáneamente.
Cuando Pekín prohibió usar disfraces
Esta no es la primera ocasión en que las autoridades chinas han determinado extremar las medidas de seguridad en esta época del año.
Ya en 2014, la policía de Pekín había alertado que las personas que utilizaran trajes llamativos en el metro durante la celebración de Halloween serían arrestadas. La razón que argumentaron es que ese tipo de prendas podría alterar el orden público y causar pánico entre los pasajeros, detalló la BBC en ese entonces.