En los últimos 174 años, no se había registrado un mes tan caluroso en el planeta como junio. Rompió todos los récords, pero julio podría terminar con cifras aún más altas, según la Organización Meteorológica Mundial (OMM).
De esta manera, las olas de calor están golpeando a varios países de América del Norte, Europa y Asia, un efecto que —según los expertos—estaría estrechamente ligado con el impacto del cambio climático global.
“Las olas de calor ponen en peligro nuestra salud y nuestras vidas. La crisis climática no es una advertencia. Está ocurriendo. Insto a los líderes mundiales a actuar ya”, escribió en Twitter Tedros Adhanom, director general de la Organización Mundial de la Salud.
Qué países son los que están viviendo temperaturas extremas
Entre los países más golpeados por las olas de calor, está Estados Unidos: en específico, el Valle de la Muerte de California (52 grados centígrados) y Buckeye, Arizona.
Al otro lado del mundo, en Sanbao, al noreste de China, se registró el récord nacional de 52,2 grados centígrados. Además, la capital, Beijing, también está experimentando temperaturas elevadas.
En partes del este de Japón, se registraron cifras de 38 a 39°C el pasado fin de semana, y la agencia meteorológica japonesa advirtió que podrían subir todavía más y superar los récords anteriores.
En Italia, en las islas de Sicilia y Cerdeña, se prevé una máxima de 48 grados Celsius según la Agencia Espacial Europea, quien declaró que se tratan de “potencialmente las temperaturas más altas jamás registradas en Europa”.
Por su parte, en Grecia, las temperaturas alcanzaron los 40 grados en la ciudad de Atenas, lo que provocó el cierre de su principal atracción turística, la Acrópolis, al menos durante las horas más calurosas.
En África, el clima está tan sofocante que el servicio meteorológico de Marruecos emitió una alerta roja de calor extremo para las zonas sur del país.
¿Por qué las temperaturas están subiendo tanto en el mundo?
El Servicio de Cambio Climático Copernicus, de la Unión Europea, aseguró que estas condiciones inusualmente calurosas tienen que ver con el cambio climático.
Además, alertó que todo indica que es una tendencia que puede continuar con el tiempo y que los fenómenos pueden ser más frecuentes, duraderos e intensos en el futuro.
“Los fenómenos meteorológicos extremos, cada vez más frecuentes en un clima cada vez más cálido, están teniendo importantes repercusiones en la salud humana, los ecosistemas, la economía, la agricultura, la energía y el abastecimiento de agua. Esto subraya la creciente urgencia de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero tan rápida y profundamente como sea posible”, afirmó Petteri Taalas, secretario general de la OMM.
“Además, tenemos que redoblar los esfuerzos para ayudar a la sociedad a adaptarse a lo que desgraciadamente se está convirtiendo en la nueva normalidad. La comunidad de la OMM está proporcionando previsiones y alertas para proteger vidas y medios de subsistencia mientras nos esforzamos por alcanzar nuestro objetivo de alerta temprana para todos”, agregó.
