Chile está ad portas de comenzar el verano. Y los expertos están preocupados por las altas temperaturas, pues se anticipa que esta temporada 2023-2024 será uno de los más calurosas de la historia, y podrían registrarse “de 3 a 10 días consecutivos con temperaturas máximas sobre los 35 °C”, según el Centro de Investigación y Transferencia en Riego y Agroclimatología (CITRA).
Aunque todavía no se han alcanzado temperaturas extremas —que son riesgosas y potencialmente mortales, en especial para ancianos, personas vulnerables, niños pequeños y trabajadores al aire libre— la BBC elaboró un termómetro para algunas regiones, incluido Chile, donde recomienda qué hacer para combatir el calor.
Santiago, Santa Cruz, Puente Alto, Valparaíso y Viña del Mar fueron calificadas como “zona climática Cálido/templado”, cuyos cambios en la temperatura no son tan extremos, en comparación a los climas secos. “Hay diferencias regionales en el calor del verano”, establecen.
En cambio, Antofagasta está en una “zona climática Árido/seco”, donde la baja precipitación, los cielos claros y la radiación solar intensa hace posible que se alcancen temperaturas récord que exceden los 40°C y puedan llegar incluso hasta los 50°C.
Estas son algunas recomendaciones del medio.
1. Acceso a la sombra
Según establece la BBC, la temperatura debajo de la sombra puede ser 15°C más baja que recibir el sol directo, pues la luz solar al contacto con la piel nos hace sentir más calientes.
Por esto, es importante tener acceso a la sombra, un lugar fresco donde el cuerpo puede “deshacerse” del calor. Por ejemplo, en Sevilla, España, las temperaturas alcanzan los 40°C y, como medida para que los habitantes puedan refrescarse en la sombra, instalaron toldos de tela extendidos entre los edificios que bordean las calles.
2. Evitar ejercitarse en un clima muy caliente
La recomendación es que la actividad más pesada se haga durante el lapso más fresco del día, que suele ser entre las 4 y 7 de la mañana. Evitar a toda costa hacerlo en el calor del mediodía.
3. Controlar, en lo posible, las temperaturas nocturnas
Estamos hablando de un peligro para la salud cuando las temperaturas no bajan de 20°C por la noche, pues a nuestro cuerpo le resulta más difícil recuperarse del calor del día.
En Inglaterra, por ejemplo, se implementaron nuevas regulaciones para que los edificios nuevos coloquen cortinas externas, ventanas con cristales que restrinjan el calor o incluso toldos en las ventanas orientadas al sur y lograr así una “refrigeración pasiva” que ayude a disminuir la temperatura interior.
4. Mantener la casa fría
Para poder reducir la temperatura dentro de casa, es ideal bloquear el calor del sol manteniendo las cortinas cerradas y que ojalá éstas sean de un material grueso. También es recomendable cambiarse a la habitación más fresca y solo abrir las ventanas si es seguro hacerlo.
5. Quienes trabajan en el exterior deben tener más cuidado
Ya desde los 24 o 26°C son temperaturas que se asocian con una productividad laboral reducida, pero ésto empeora cuando el termómetro toca los 33 o 34°C, según la Organización Internacional del Trabajo.
Si bien todas las ocupaciones se ven afectadas con el calor, las que implican más esfuerzo físico y se desarrollan al aire libre, corren más riesgo de sufrir insolación u otros peligros que pueden ser fatales.
6. Pintar de blanco
Las temperaturas pueden reducirse por dentro y por fuera de los edificios y casas, pintando los techos de blanco. Así lo descubrió Berkeley Lab: un techo blanco, limpio y pintado con pintura reflectante blanca reflejó 80% de la luz solar y redujo las temperaturas de la superficie del techo en 31°C durante una tarde de verano.
7. Vestirse adecuadamente
Hay que evitar utilizar ropa de tela pesada, como la lana, poliéster o mezclilla. En su lugar, es preferible optar por el lino, seda, jersey de algodón o algodón.