A casi 9 años de la muerte de Canserbero, quien fue una de las principales figuras del rap en español, su caso ha dado un giro rotundo.
Si bien inicialmente se presumía que se trataba de un suicidio, eso cambió recientemente con la reapertura de la investigación. Y ahora su ex mánager, Natalia Améstica, confesó ser la autora del crimen del rapero venezolano.
No solo aseguró haberle quitado la vida al intérprete de Maquiavélico, sino que también a su propio esposo, Carlos Molnar.
En una declaración que entregó a la Fiscalía de Venezuela, Améstica aclaró qué pasó ese 20 de enero de 2015. “Estoy haciendo este video para confesar públicamente mi responsabilidad en el doble homicidio de Carlos Mungar y Tirone González”, explicaba frente a la cámara.
Cabe recordar que a inicios de noviembre, el fiscal general del Ministerio Público de Venezuela, Tarek William Saab, daba a conocer la reapertura de la investigación por el fallecimiento del cantante de Pensando en Ti. En diciembre, Saak apuntó que la tesis del suicidio quedaba “descartada” y que Natalia y su hermano, Guillermo Améstica, fueron imputados por el delito de homicidio calificado.
Quién es Natalia Améstica
María Natalia Améstica fue representante de Canserbero, mientras este desarrollaba su carrera musical. De acuerdo a lo informado por el fiscal Saab, ella y su hermano tienen raíces chilenas.
Estaba casada y tenía dos hijos con Carlos Molnar, quien era amigo de Canserbero y bajista de la banda de reggae Zion TPL. Este último también fue hallado fallecido ese 20 de enero de 2015 en un edificio de Maracay, estado de Aragua.
Améstica estuvo implicada en la última gira de Canserbero junto a Molnar.
Desde el inicio aseguró estar presente el día de la muerte de los dos hombres. Sin embargo, como testigo del caso habría entregado varias declaraciones falsas o contradictorias ante la Fiscalía de Venezuela. Entre ellas, que el artista sufría de ataques de esquizofrenia.
La mujer incluso sugirió que un ataque psicótico habría sido el detonante que llevó a que Canserbero supuestamente asesinara a Molnar en Maracay, y después, se quitara la vida lanzándose desde el piso 10 del mismo edificio.
Sin embargo, de acuerdo a su confesión, ese día fue ella quien le quitó la vida al músico y a su esposo.
La ex mánager de Canserbero apuntó que, ese 20 de enero de 2015, esperó que los hijos que compartía con Molnar abandonaran el hogar junto a su abuela. Apenas vio la oportunidad les hizo un té mezclado con ansiolítico a los hombres, para poder drogarlos y dejarlos somnolientos.
“Yo estaba en la cocina preparando la cena y al llegar Carlos (Molnar) vi cómo estaba y lo ataqué directamente al cuello. Carlos cae al piso, lo ataqué por la espalda y por el brazo y quien me ve es Tirone”, explicó Améstica en su confesión.
Al ver el hecho, Canserbero se habría mostrado preocupado pues estaba somnoliento. Ahí, Améstica le dijo que lo había hecho por “un ataque de ira”. A continuación, el rapero cayó al sofá y fue apuñalado, tras lo cual la mujer llamó a su hermano Guillermo para que la “ayudara a resolver esa situación”.
Lo que vino más tarde fue una serie de acciones de Améstica y otras personas -incluidos funcionarios del organismo de inteligencia de Venezuela- para intervenir y contaminar la escena del crimen. El objetivo: fingir que se trataba de un homicidio-suicidio.
De acuerdo al relato de Améstica, su hermano incluso le habría ofrecido dinero a los funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas, quienes son los encargados de investigar los hechos.
Después de prestar sus declaraciones, la ex representante de Canserbero huyó a Chile, “pensando que al final se iba a saber la verdad”. Se mantuvo durante todos estos años en nuestro país, hasta que este año, con la reapertura del caso, la contactaron para que volviera a declarar.
“Yo voy con la confianza de que tanto Fiscalía como Cicpc decían que era un homicidio o suicidio”, dijo en el video.
Esa no sería la única conexión del caso de Canserbero con Chile. Al parecer, el inicio del conflicto que la llevó a asesinar a los dos hombres coincidentemente ocurrió en tierras nacionales.
“El problema empezó en Chile un mes antes, cuando en plena gira supe, después de haber hecho la organización y comprar los pasajes para irnos para allá, que no iba a recibir pago por parte de Carlos”, detallaba la mujer.
Luego, siguió: “Quería que me pagaran los pasajes que había comprado, más un porcentaje por haber hecho la organización de dicha gira. También se dio que Tayron nos expresó que no quería que lo manejara yo como manager, aún yo había hecho esa gira de Argentina y Chile y todos los demás trabajos de marketing que había trabajado para sus fechas”.