La historia data que en 1962, el mundo vivía una crisis profunda y peligrosa: Estados Unidos y la Unión Soviética estuvieron a punto de iniciar una guerra nuclear. Washington le pedía a Moscú que retirara sus misiles nucleares, que habían instalado en Cuba.

Para intentar controlar los territorios, ambas naciones tenían embarcaciones militares cerca de las costas cubanas, pero hubo submarinos de la Unión Soviética armados con torpedos que contenían ojivas nucleares, es decir, armas de destrucción masiva.

La orden que recibieron fue que, si sucedía un ataque estadounidense, debían responder con un torpedo nuclear. Sin embargo, de los tres comandantes a cargo, solo uno se negó a obedecer: Vasili Alexandrovich Arkhipov.

Quién fue Vasili Arkhipov, el hombre que nos salvó de una guerra nuclear. Foto: Wiki Commons

Cómo un solo hombre salvó al mundo de una guerra nuclear

El protocolo de la Armada soviética establece que, para poder disparar un torpedo nuclear, se necesita la aprobación de los tres comandantes de la flota.

Así, los submarinos soviéticos estaban a cerca de 200 kilómetros de suelo estadounidense, por lo que los misiles podían fácilmente impactar a las principales ciudades del país y destruirlas en cuestión de minutos.

Por ello, el entonces presidente John F. Kennedy desplegó a sus tropas y embarcaciones para defenderse y hacer una especie de cerco en Cuba, para que no pudieran entrar más suministros a abastecer la base nuclear.

Quién fue Vasili Arkhipov, el hombre que nos salvó de una guerra nuclear

Moscú se puso en alerta, y aún más cuando el 27 de octubre de 1962, cuando un acozarado —un gran buque de guerra blindado y artillado— detectó a uno de los submarinos soviéticos y comenzó a disparar una munición no letal, para lograr que saliera a la superficie.

Fue en ese momento, que dos de los tres comandantes estaban de acuerdo con defenderse utilizando sus torpedos nucleares contra EE.UU., sin embargo, Vasili Arkhipov pensó que era una mala idea. No hubo unanimidad, por lo que el hombre impidió que se desencadenara una guerra nuclear que afectaría a toda la humanidad.

“Ese hombre realmente salvó al mundo de un holocausto nuclear y, sobre todo, lo hizo porque no se dejó llevar por los impulsos y siguió estrictamente el protocolo establecido por Moscú”, dijo Edward Wilson, autor de The Midnight Swimmer, el libro que detalla la historia de Akrhipov, a BBC Mundo.

No obstante, el reconocimiento de que fue el hombre que impidió que se desencadenara una guerra nuclear no llegó, sino hasta después de su muerte, en 1998.

“Gracias a él y a que calmó al capitán, que estaba afectado por el calor del submarino y la situación de acoso que sufría por parte de la armada estadounidense, no hubo una III Guerra Mundial con consecuencias apocalípticas”, aseguró Wilson.