Según recientes descubrimientos, ya sabemos que hace millones de años, Marte fue un planeta húmedo, con ríos y lagos, como la Tierra. Pero en algún momento, probablemente hace unos 3.800 millones de años, debido a la radiación y el viento solar, perdió su atmósfera, derivando en la evaporación y/o congelación del agua. Y aunque actualmente el planeta es un desierto helado, un artículo publicado hoy en la revista Science, reveló lo que parece ser un enorme lago salado de 20 kilómetros de ancho, alrededor de 1,5 kilómetros bajo la superficie de hielo, a una temperatura de entre menos 30 y los 70 grados celsius.
El agua
Si bien encontrar alguna evidencia de vida será difícil y se necesitarían muchos años para realizar los trabajos de perforación, el hecho de encontrar agua en ese estado ya significa algo, debido a que podrá dar pistas a los científicos sobre la historia de Marte y de los inicios del Sistema Solar. Por el lado de la búsqueda de vida extraterrestre, el agua líquida es esencial para todas las formas de vida que conocemos, aunque existen algunas limitantes, como el hecho de contar con un "anticongelante", lo que quiere decir que está muy por debajo del punto de congelación del agua, y lo único que impide que se convierta en hielo es una mezcla de sales tóxicas. Sin embargo, aquél punto, junto al frío y la presión no tienen por qué impedir que contenga vida.
Ejemplos hay muchos. En la Tierra se han encontrado especies de vida microbiana en el lago Vostok, un enorme depósito de agua enterrado bajo 4 km de hielo en la Antártida; lo mismo ha ocurrido en las aguas venenosas y ricas en arsénico del lago Mono en California; en el Desierto de Atacama en Chile se descubrió un "oasis" de bacterias, arqueas (microorganismos primitivos) y restos biológicos, organismos que increíblemente no necesitan de oxígeno ni luz solar para sobrevivir; otros estudios mencionan a los géiseres de El Tatio como una clave para encontrar vida en Marte; también se han descubierto microorganismos en las aguas termales calientes del Parque Nacional Yellowstone; y en el helado permafrost de Siberia. Comparado con eso, un poco de agua helada marciana no se ve tan mal.
La vida extraterrestre
Por suerte, sabemos que los microbios son increíblemente eficaces para encontrar formas de sobrevivir. Por lo mismo, este descubrimiento convierte de nuevo a Marte en prioridad para la búsqueda de vida, tal como la luna de Júpiter, Europa, y Encélado, la luna de Saturno, ambas con grandes masas de agua.
Así, este hallazgo hace que la posibilidad de vida no sólo sea probable en términos de encontrar vestigios extintos, sino ya existentes. En tal caso, la elección del objetivo y los consecuentes recursos y esfuerzos parece más vital que nunca. Las próximas misiones al planeta rojo serán "Insight", que estudiarán su interior analizando la cantidad de calor liberado desde sus entrañas, y "Exomars", que iniciará su viaje en 2020 y está previsto que llegue en 2021, aterrizando en uno de los dos lugares donde se cree que hay agua líquida y haya fluido a la superficie, con la capacidad de perforar hasta dos metros en el suelo para buscar signos de vida. Poco, si pensamos en un grosor de 1,5 Km. Sólo en el lago Vostok, con algunas paradas intermedias, demoró 16 años en completarse.
Aún así, los científicos ya mencionan que el lago representa una de las mejores oportunidades para encontrar microbios vivos en Marte. Los problemas, como el el frío -cerca de -70° C- y los químicos lo convierten en un ambiente "desafiante" para encontrar vidam pero ambientes inhóspitos como el ya mencionado lago Vostok demuestran que es posible albergar vida microbiana resistente.