Las personas que sobreviven al mortal virus Ébola pueden seguir sufriendo problemas psiquiátricos y neurológicos graves, incluyendo depresión, migrañas debilitantes, dolores neurálgicos y accidentes vasculares, según un estudio publicado este miércoles.
Investigadores que analizaron a pacientes infectados durante el brote de Ébola surgido entre 2014 y 2016 en África occidental hallaron que algunos sobrevivientes sufrían de condiciones de salud tan graves que ya no podían cuidarse a sí mismas.
"Sabíamos que una enfermedad tan grave como el Ébola dejaría a los sobrevivientes con graves problemas. Sin embargo, me sorprendió ver a gente joven y previamente activa que sobrevivió pero que ahora no podía mover la mitad de sus cuerpos, hablar o cargar a sus hijos", dijo Janet Scott, de la Universidad de Liverpool en Reino Unido, que colideró la investigación.
Scott afirmó que los hallazgos muestran la necesidad de estudios más grandes y detallados de sobrevivientes del Ébola frente a personas que no hayan sufrido el contagio del virus.
El estudio, publicado en la revista Emerging Infectious Diseases, examinó archivos de más de 300 sobrevivientes del Ébola en Sierra Leona, uno de los países más afectados por la epidemia entre 2014 y 2016.
Luego se escogieron a 34 pacientes a los que se pidió que asistieran a una clínica neuropsiquiátrica en 2016, cuando fueron sometidos a un completo examen neurológico y psiquiátrico y a investigaciones especiales, incluyendo un escáner cerebral.
Patrick Howlett, del King's College London y coautor del estudio, afirmó que los resultados muestran que los sobrevivientes de Ébola pueden sufrir de una amplia gama de dolencias que van "desde algunas menores a otras extremadamente graves e invalidantes".
La epidemia de Ébola en África occidental provocó la muerte de más de 11.300 personas e infectó a cerca de 28.000 en Guinea, Sierra Leona y Liberia. Estimaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) sugieren que más de 10.000 personas habrían sobrevivido a la enfermedad.